Durante un allanamiento realizado por pedido de la Justicia Federal de Mar del Plata se descubrió que en un campo de Balcarce eran mantenidos cautivos más de 300 animales salvajes bajo condiciones que ahora se investiga si eran las adecuadas

Tigres, pumas, búfalos, más de un centenar de muflones, ciervos y hasta un loro hablador habitaban las jaulas dispuestas en un monte ubicado a 8 kilómetros al noroeste de la localidad de Balcarce.

Ahora se trata de determinar si dichos ejemplares eran parte de un mercado ilegal de tráfico o si en el lugar se exhibían como en un zoológico clandestino, indicaron las fuentes consultadas por LA CAPITAL.

El personal de la Policía Federal que llegó al lugar con apoyo de la Patrulla Rural llevaba la orden del juez Santiago Inchausti solicitada previamente por la fiscal Laura Mazzaferri, quien dio curso así a una denuncia presentada por la Brigada de Control Ambiental del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Nación.

En la denuncia se hacía referencia al eventual tráfico de estos animales, la mayoría de ellos salvajes, silvestres y no autóctonos del partido de Balcarce. Se trata además de especies protegidas por la Ley de Fauna Silvestre.

Los ejemplares vivos hallados son 2 Tigres, 10 Pumas (4 machos y 4 hembras, dos crías), 14 Ciervos colorados, 12 Antilopes, 6 Ciervos Axis, 57 Ciervo dama (48 y 9 crías), 1 Guanaco, 20 Pavos Reales, 1 Gato montes, 1 Llama, 1 Búfalo, 150 Muflones, 2 Ñandúes, 9 Jabalíes, 1 Perdiz colorada, 1 loro Hablador, 1 Cardenal Amarillo,  1 Reina Mora, 1 Naranjero, 1 Jilguero Español, 3 Corbatas Comunes, 1 Jilguero amarillo, 1 Mirlo Moñudo, 2 Estorninos comunes y 2 Cardenales Copete Rojo.

Además también había trofeos de caza desde cueros de puma  a cornamentas de ciervo dama y de axis.

En otro sector del establecimiento rural se secuestraron armas y un teléfono celular.

A causa de la singularidad de lo hallado en el lugar, la Justicia ordenó que se los mantuviera allí en tanto se analiza la procedencia y el destino de estos animales.

“La Fauna Silvestre está muy reglamentada y para tener lo que esta gente tenía allí es necesario una cantidad importante de documentación. Es obligatorio un registro de cada animal según la especie, la habilitación del predio, el tipo de alimentación documentada, y otros aspectos más”, señaló la fuente consultada.

En principio trascendió la versión que una parte de esos animales pertenecían al viejo zoológico de Sierra de los Padres, que funcionara hasta el año 2017. No obstante esa es otra de las averiguaciones que se realizan por estas horas y que aún no fue esclarecido