Emiliano Giri, ex titular del Ente de Turismo (Emtur), fue visto salir hoy a las 11.35 de la oficina del intendente Carlos Arroyo, en un momento en el cual están haciéndose públicas algunas llamativas licitaciones y contrataciones efectuadas por el organismo que estaba a su cargo hasta hace una semana.

Su presencia en el Palacio Municipal, más precisamente en la oficina de Arroyo, causó sorpresa entre quienes lo vieron en el lugar. Vestido de negro, Giri salió del despacho en un momento en el cual había una gran concurrencia de público en el hall del edificio, lo que permitió que fuera visto por decenas de personas.
Su presencia dio lugar a diversas especulaciones, debido a que el empresario ya había sido recibido por el intendente anoche, 10 días despues de que renunciara al ser detenido por la Justicia por estar imputado en una causa por corrupción.
Fuentes del Ejecutivo habían dejado trascender que Arroyo había recibido a Giri este jueves en lo que fue presentado como una suerte de “visita social” de 15 minutos.
Por eso el hecho de que regresara hoy resultó por demás llamativo. Altas fuentes del gobierno local consultadas por LA CAPITAL precisaron que la Municipalidad “no informará nada” acerca de las razones por las que Giri regresó hoy al municipio.
Lo cierto es que por estas horas están saliendo a la luz algunas decisiones dudosas adoptadas durante su gestión del Ente de Turismo.
Por ejemplo LA CAPITAL reveló que el ex funcionario le adjudicó a una empresa de informática, propiedad de un allegado, el servicio de limpieza de las oficinas del ente, por una suma de más de $ 693.000.
Por su parte el sitio de noticias www.0223.com.ar publicó que el organismo estaba llevando adelante una licitación por $ 600.000 para contratar un servicio de “asesoramiento creativo”.
Estos hechos se suman a las irregularidades denunciadas por concejales sobre la instalación de banners publicitarios en las columnas de alumbrado público.
En este caso la Municipalidad le otorgó el negocio a la agencia de publicidad “La Base Marketing” sin la debida autorización y, aparentemente, violando una prohibición vigente en el Código de Publicidad.
Por eso días atrás el Ejecutivo decidió gestionar ante el Concejo Deliberante una suerte de permiso para tratar de regularizar la situación, proponiendo darle a esa empresa un curioso beneficio, eximiémdola del pago de tasas.
En el proyecto se planteó que como contraprestación la firma no abonaría dinero, sino que donaría un sistema de iluminación para el Teatro Colón, supuestamente valuado en $ 290.000.