MIRAMAR (Corresponsal)

Muchas veces la policía es foco de diversas críticas, aunque en esta oportunidad vale la pena hacer mención al sargento Lucas Ponce y el sub inspector, Nelson Albornoz, quienes se desempeñan en el Comando de Patrulla Comunitaria de Miramar y durante la noche del martes en un heroico accionar le salvaron la vida a Tiago, un niño de 4 años que vacacionaba con su familia y sufrió una severa descompensación, al parecer producto de un golpe de calor, que lo había dejado inconsciente.
“Fue una experiencia que nunca olvidaremos. Tenemos un enorme orgullo y satisfacción al saber que el nene está bien de salud”, indicó Albornoz a LA CAPITAL.
De todas maneras, el efectivo miramarense no dudó al decir que “el momento fue muy complejo, por suerte actuamos de la manera adecuada con mi compañero y pusimos en práctica la formación que se nos dio en la escuela de policía”. Albornoz también destacó, “el compromiso de todos lo que atendieron al chiquito”.
“Hay un trabajo conjunto y esforzado del CPC con otras áreas y el municipio, sin dudas este hecho nunca lo vamos a olvidar en la vida y como hoy se lo contamos a nuestros hijos, el día de mañana si Dios quiere también se lo comunicaremos a los nietos”, concluyó el policía consultado por este matutino.

El episodio

Pasadas las 20:30 del martes el pequeño que pasaba unos días de descanso junto a sus padres – oriundos de Haedo -, en una casa del barrio Parquemar comenzó a sentirse descompuesto y su estado de salud se fue agravando en un corto lapso hasta desmayarse.
Esto determinó que sus progenitores salieran en un vehículo a toda velocidad y tocando bocina por la avenida 40 sin saber dónde quedaba el nosocomio local. En la intersección con la calle 11 dieron con el patrullero que justo en ese momento hacía el relevamiento del turno de vigilancia.
Allí estaban Albornoz y Ponce, quienes sin dudar cargaron al pequeño y mientras el primero de ellos conducía el vehículo, su acompañante le aplicaba maniobras de reanimación cardiopulmonar hasta que metros antes de arribar al hospital “Marino Cassano”, Tiago realizó un suspiro y comenzó a superar ese trance de inconsciencia.
Una vez en el sector guardia, fue atendido por los profesionales médicos, enfermeras y con el correr de las horas su estado de salud mejoró considerablemente. Esto ponderó a aún más la actuación de los efectivos ya que lograron salvarle la vida.
Ayer por la mañana, en inmediaciones de la sala de pediatría se produjo un encuentro emocionante con el nene y sus padres quienes lógicamente les dieron las eternas gracias a los policías, dejando atrás un momento que ninguno de los protagonistas jamás olvidará.