Este viernes estará en Mar del Plata el embajador argentino en Brasil, Daniel Scioli, quien se reunirá con representantes de la pesca y con el intendente Guillermo Montenegro. Scioli arribará el viernes a la mañana para desplegar intensa actividad, especialmente en relación a la reanudación de las exportaciones de langostinos a Brasil en lo cual tuvo directa participación. La visita del ex vicepresidente y ex gobernador se da en coincidencia con el hecho de que luego de ocho años, Argentina volvió a exportar langostinos a Brasil y una firma local fue la que certificó el primer embarque, el cual incluyó más de 23 toneladas de este producto marino. La noticia fue confirmada por el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación y el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), desde donde se destacó el trabajo coordinado realizado por los gobiernos de ambos países para volver a abrir este mercado. Buena Proa fue la firma local que certificó el cargamento enviado desde Mar del Plata a Brasil y que estuvo compuesto por 1231 cajas de cola de langostino congelado, 14 de langostino entero congelado y 84 de langostino pelado devenado con un peso neto total de 23.306 kilogramos. 

Cabe recordar que el embajador en Brasil, Daniel Scioli, había anunciado el pasado martes 2 de marzo que Argentina volvería a exportar langostinos a Brasil, luego de que la Justicia de ese país decidiera levantar la medida cautelar que suspendía el comercio bilateral de estos productos desde 2013. “Tras las gestiones realizadas por la Embajada que dirijo, el Supremo Tribunal Federal de Brasil vuelve a autorizar la importación de langostinos argentinos. Las mismas estaban suspendidas desde 2013, por una medida cautelar”, celebró Scioli tras el anuncio. En aquella oportunidad, el embajador adelantó también que “la exportación de langostinos representa un volumen exportable de 50 millones de dólares anuales, especialmente para las provincias de Chubut y Buenos Aires“. Tras aquel anuncio, la industria pesquera elogió las gestiones y así se lo hicieron saber a Scioli la Cámara de Armadores de Pesqueros y Congeladores de Argentina (Capeca), la Cámara Argentina Patagónica de Industrias Pesqueras (Capip), el Consejo de Empresas Pesqueras Argentinas (CEPA), y la Cámara de Armadores de Poteros Argentinos (CAPA) en una reunión virtual celebrada el 11 de marzo. La reapertura del mercado de langostinos había sido formalizada el mes pasado en la ciudad de Brasilia, donde el ministro Basterra, su par brasileña, Tereza Cristina Corrêa da Costa Dias, y el embajador Scioli remarcaron el objetivo de “reforzar los vínculos de amistad, mercio,peración y coordinación bilateral”

Lamentablemente, coincidían en señalar, fueron las últimas reuniones en quién sabe por cuanto tiempo. El ingreso de Mar del Plata a fase 3 marca al menos por un tiempo el final de los “encuentros sociales” donde los periodistas pueden recabar jugosa información. Por eso, los dos cumpleaños de políticos, las bodas de oro de casado de reconocido empresario y el agasajo de empresa multinacional a un pequeño grupo de invitados especiales, realizados entre el fin de semana y la noche del martes, se convirtieron en los últimos en el marco de la pandemia, hasta que mejore la situación sanitaria. De economía, política obviamente, deportes y hasta de espectáculos se habló largo y tendido en esos espacios donde, claro está, el coronavirus era el tema excluyente. Un dato: al menos la mitad de los participantes de esos encuentros, ya habían sido algunos de los casi 51 mil marplatenses y batanenses contagiados desde el inicio de la pandemia. Si es real aquello que señalan algunos especialistas en el sentido de que hay que multiplicar por 9 la cantidad de contagios para tener una idea cabal de la verdadera suma de infectados -asintomáticos, no testeados, etc- se llega a la conclusión de que en este distrito tuvieron Covid casi 450 mil personas. Un dato que no deja de sorprender.

El viernes, en el club house de un barrio privado del sur, el empresario y su esposa celebraron las bodas de oro de casados, esta vez con amigos. Es que fueron al menos cuatro cenas distintas teniendo en cuenta los cuidados por el coronavirus. En esta última, tras sortear liebres y zorros que se cruzaban por las calles, llegaron hasta la residencia un par de empresarios, periodistas y un funcionario provincial quien contó que semanas atrás había estado en Mar del Plata la ex gobernadora María Eugenia Vidal. “Fue una visita de perfil bajo total, en familia. Sólo pude saber que cenó con el intendente Montenegro, su esposa y los chicos”dijo. Se quejaba el visitante también, como miles de marplatenses, por el estado de la autovía 2. “Es un desastre, está llena de pozos. Y cuando llueve es un peligro en serio. La verdad, da pena. Y eso que es nuestra”, reconoció. El periodista no le fue con vueltas. “Y lo que cobran de peaje es un afano. Si pagas por lo menos querés que no se parezca a las calles marplatenses”, aseguró.

Todos allí sabían que llegarían las restricciones -que no se acabarán en estos días por cierto- y uno de los hombres de negocios, dedicados a la gastronomía, era quien más se lamentaba. “Veníamos heridos y ahora quedamos con respirador. No da para mucho más, al menos lo mío”, se quejó, y fustigó a quienes critican al sector empresarial argentino. “Cansa escuchar hablar a quienes no tienen idea de nada. Hay una frase de Winston Churchill -resaltó- que es brillante. El tipo decía que muchos miran al empresario como el lobo al que hay que abatir, otros lo miran como la vaca que hay que ordeñar y muy pocos lo miran como el caballo que tira el carro. Ser emprendedor -añadió durante la copa de espera- no es para cualquiera. Si hay ganancias tenés una pila de mejores amigos, todos ellos falsos. Si hay pérdidas nadie te va a venir a dar una mano. El Estado te esquilma con impuestos, los gremios están viviendo en otra época y nadie comprende que así la cosa no va más. Sólo quien carga el saco sabe lo que pesa”, esgrimió ante el silencio de todos. Cambio de tema el periodista, que preguntó si alguno de los presentes tenía idea de “cómo es la historia del bitcoin”.

Hubo explicaciones extensas -el periodista reconoció finalmente que estaba más confundido que antes de preguntar provocando la risa de todos- pero se comentó un hecho que no deja de ser novedoso. “Hay unos empresarios jóvenes de Mar del Plata que ahora van a largar la comercialización de unos departamentos de edificio a construir cerca del Paseo Aldrey que se van a poder pagar con bitcoins. Y, vivos, largan con una bomba publicitaria. Van a vender un departamento a un bitcoin”, se escuchó. Otro de los presentes, recién llegado de Córdoba, por negocios -“tengo que ir a cerrar un acuerdo en Brasil hace un mes y cada vez se complica más el poder viajar”, alegó- ya en la mesa, mientras se degustaba exquisita paella, expresó su sorpresa por las colas que había visto ese mismo viernes frente a varios comercios marplatenses adheridos a la cuenta DNI del Banco Provincia, con descuentos, en esa jornada, de hasta un 45 por ciento con un tope de reintegro de mil pesos por compra. “Pasé por una dietética de la zona de Constitución y una carnicería del centro y te aseguro que había colas de más de veinte personas”, ilustró. “En la época de las billeteras digitales, los del Provincia salieron a robarle clientes a Mercado Pago y te aseguro que lo lograron”, dijo el economista del grupo.

La noche, sin viento y con agradable temperatura, invitó a seguir la charla, whisky en mano, en el parque. El funcionario municipal admitió que había estado todo el día en comunicación con la Conmebol y con dirigentes de clubes argentinos para “invitarlos” a jugar los partidos de la Sudamericana y la Libertadores en Mar del Plata ya que no podían hacerlo de noche en CABA en el marco de las restricciones anunciadas por el presidente de la Nación. “Teníamos a un par a punto caramelo pero a la noche el gobierno nacional terminó autorizando la realización de los partidos, así que todo quedó en la nada”, se lamentó. A propósito de fútbol, el funcionario, fanático de River, canchereó después de consultar el teléfono. “Ahora hacemos de a cinco”, comentó, en relación a la goleada del triunfo del equipo de Gallardo, esa noche, ante Central Córdoba de Santiago del Estero por 5 a 0.

En otro quincho, en la zona del Parque Primavesi, el concejal celebraba cumpleaños con un asado -con una picada previa para el recuerdo- y cinco parejas invitadas en la noche del sábado. Fue la joven esposa de otro concejal la que regaló la “primicia” a los presentes. “¿En serio no lo sabían?”, preguntó asombrada tras ofrecer lujo de detalles. “La hija de Luis Miguel es marplatense”, había dicho para arrancar generando la atención de todos, incluso de los hombres que finalmente admitieron que se habían enganchado con los dos capítulos de la segunda temporada de la serie de Netflix. “Macarena Achaga, que es amiga de mi hija, es marplatense. Es la actriz que interpreta a la hija que Luis Miguel negó durante once años, Michelle Salas”, reveló. Luis Miguel se convirtió en papá a fines de los 80 luego de su breve romance con la actriz Stephanie Salas: Sophie -quien ya aparecía en la temporada anterior- tenía 19 años cuando dio a luz a Michelle. Pero el ídolo desconoció a la niña. Y cuando por fin lo hizo -11 años más tarde- volvió a alejarse al poco tiempo, perdiendo contacto con ella casi por completo, se relató.

“Macarena -siguió contando la arquitecta esposa del concejal- nació en 1992. Hizo modelaje en Mar del Plata y después pasó a conducir “Los 10 más pedidos” en MTV, a realizar distintas campañas publicitarias y ser tapa de varias revistas. Se fue a México, donde la rompió en una tira juvenil llamada Miss XV, de Nicckelodeon, también brilló en la serie chilena Sitiados, junto a Benjamín Vicuña pero hace tres años llegó a la gran fama con su personaje en la novela mexicana Amar a muerte. Macarena pasó a ser un ícono de la comunidad LGBT gracias al romance de Valentina Carvajal con Juliana Valdés, interpretada por una actriz mexicana. La otra vez Macarena, que también hizo de azafata en la mini serie La Piloto, vino a pasar las fiestas con su familia acá. Los padres, Soledad y Leopoldo, son arquitectos. Esta piba de Mar del Plata, acuérdense, después de la serie de Luis Miguel pasa a jugar en otro nivel”, resaltó. Y anunció que este domingo se estrenará el capítulo donde aparece ella. El dueño de casa “googleó” y mostró una foto de la mencionada actriz, y lanzó un “se merece ya ser nombrada ciudadana ilustre”. A su esposa, la broma (¿sería una broma?) mucho no le gustó.

Las mujeres siguieron hablando de series y se recomendaban títulos, al tiempo que los dos concejales de la mesa -ambos de la oposición- comentaban lo vivido en una de las comisiones donde se trató el pliego para la licitación del transporte, donde la sorpresa la dio nada más y nada menos que el presidente del bloque del oficialismo, Alejandro Carrancio, “boleteando” la iniciativa para algarabía de los opositores y bronca del resto de los ediles de Montenegro. “Un papelón. Me dijeron que el petiso (por Santiago Bonfiatti, secretario de Gobierno y a cargo de la iniciativa del transporte trabajada durante meses) lo quería matar. Es más, para él también es una derrota. Fracasó todo y ahora habrá prórroga”, dijo el dueño de casa.

Del mismo tema se hablaba el martes a la noche en la casa de La Florida del ex funcionario municipal que festejaba su cumpleaños 63 años “recién vacunado con la rusa”, según dijo en varias oportunidades. “Lo de este pibe Carrancio es una locura. En realidad mete presión por Lucas Fiorini, quien este año termina el mandato como senador provincial y quiere la reelección pero no tiene ninguna garantía de continuidad”, dijo el dirigente del PRO que no forma parte del actual gobierno aunque tiene contacto directo con el intendente. “Montenegro se enteró por los medios que estos habían armando un partido político nuevo. Siendo presidente del bloque al menos podría haber mandado un Whatsapp. Para el gobierno Carrancio ya no es tropa propia. No lo cuentan más. El Gordo (por Montenegro) le pagó muy bien a Fiorini y a él cuando se ganó la elección. Si fuera por mí -siguió diciendo mientras el resto le daba duro y parejo al sushi – le saco toda la gente que tiene en el Emtur, en Obras Sanitarias y en otras dependencias”. El cumpleañero, “compañero”, metió un poco de cizaña. “Van a tener que tener más cuidado en la próxima lista en la elección a concejales. Hoy en el bloque tienen mil posturas distintas. Uno habla con uno que te dice una cosa y después otro te dice lo contrario. Al final los cumpas del Frente de Todos, en eso son distintos. Son monolíticos”, disparó.

“Lindo quilombo tienen ustedes con el Pelado”, replicó el del PRO mientras en el televisor del quincho se seguía viendo la “novela” de las clases presenciales con la polémica judicial, justamente en esa noche del martes. “Quedate tranquilo que la Corte va a resolver a favor de Alberto y le va a dar validez al DNU. Acá perdieron todos. El Presidente sufrió un desgaste bárbaro, es cierto pero ojo que a Larreta lo sacaron de su libreto. El tipo venía como el moderado que quería pescar votos por afuera pero al final se metió en el barro empujado por Macri y Bullrich”, replicó el cumpleañero. “Si se les va Carrancio del bloque ustedes no van a poder aprobar más nada”, volvió a chicanear al macrista sentado justo frente a él. “Ojo que capaz que se va uno de Vamos Juntos pero vienen dos”, dijo enigmático. Desde la otra punta de la mesa, el colega de prensa nombró a Mercedes Morro y a Mauricio Loria. “Ni idea, ni idea”, escapó con una sonrisa el amigo del jefe comunal justo cuando se colocaron sobre la mesa los dos potes de helado.