No hubo hazaña para River. Estuvo cerca. Muy cerca. Inclusive la mereció largamente. Pero esta vez el VAR le jugó una mala pasada. Le anuló un gol que hubiese empatado la serie y un penal que Montiel se disponía a ejecutar. Al cabo, el 2-0 como visitante de Palmeiras no alcanzó y el equipo brasileño se impuso 3-2 en el global y se convirtió en el primer finalista de la Copa Libertadores.

Ahora el conjunto paulista espera por Boca o Santos para la final programada para el 30 de enero en el mítico estadio Maracaná.

El equipo de Marcelo Gallardo salió a jugar el partido con una personalidad enorme. Y aún pese a la gran desventaja que arrastraba desde el partido de ida que perdió 0-3 como local, de movida impuso respeto. Siempre flotó la sensación de que River podía concretar la hazaña en la noche de San Pablo.

Con el agregado de que dos de los señalados por sus graves errores en el partido de ida, tuvieron rápidamente la posibilidad de redimirse. Es que a los 10′ Franco Armani fue determinante para tapar un mano a mano con el partido sin goles.

Y a los 28′ Robert Rojas metió un cabezazo espectacular para decretar la apertura del marcador. El gol del central paraguayo potenció la fe visitante y también la paranoia del local.

River se llevó por delante a un atribulado Palmeiras. Estuvo cerca del segundo al menos en dos ocasiones antes de lograrlo finalmente en el minuto 43′, con otro cabezazo de Rafael Santos Borré dentro del área chica.

Con un tiempo por delante, el mejor equipo de Argentina ya estaba a un gol de los penales. Y la serie abierta claro.
River no mermó en su sed de venganza tras el descanso.

Presionó desde el mismo reinicio del juego. Estuvo cerca del tercero con un tiro libre de De la Cruz a los 2′. Y lo consiguió a los 6′ con un encuentro entre los dos laterales que anoche fueron volantes ofensivos. Centro de Angeleri y latigazo cruzado de Montiel que se metió junto a un palo.

Era el 3 a 0. Pero no lo fue. Porque tras una larga deliberación a instancias del VAR se anuló por un off side previo de Matías Suárez la conquista que entonces igualaba la serie semifinal.

Esa decisión aplacó los ánimos del equipo argentino y le dio un poco de aire al dueño de casa. Entonces el trámite se hizo más equilibrado, con Palmeiras dividiendo al menos la posesión de la pelota.

Para peor River se quedó con un hombre menos a los 28′, cuando Robert Rojas vio la segunda tarjeta amarilla y se fue expulsado.

Sin embargo, otra vez la situación desventajosa significó un estímulo extra para River. Al punto que volvió a presionar arriba y a llegar al área rival con frecuencia.

A los 31′ Matías Suárez fue derribado dentro de área y el árbitro cobró el penal. Pero otra vez entró en escena el VAR. Esta vez Ostojich fue a chequear y rectificó su decisión inicial, entendió que el delantero de River se había tirado y anuló la sanción. Polémico.

River, que había hecho un enorme desgaste, comenzó a dejar espacios atrás. Si Palmeiras no los aprovechó fue porque jugó toda la noche asustado. Temeroso.
A los de Gallardo no les alcanzó para concretar la hazaña.

La merecieron largamente. Por su coraje, por su superioridad. Y porqueel VAR esta vez pareció perjudicarlo.

La síntesis

Palmeiras 0
Weverton; Marcos Rocha, Gustavo Gómez, Empereur y Matías Viña; Menino, Zé Rafael y Danilo; Rony, Luiz Adriano y Scarpa. DT: Abel Ferreira.
River 2
Armani; Paulo Díaz, Robert Rojas y Pinola; Montiel, Ignacio Fernández, Enzo Pérez, De La Cruz y Angileri; Matías Suárez y Santos Borré. DT: Marcelo Gallardo.

Goles: en el primer tiempo, 28′ Robert Rojas y 43′ Santos Borré.
Cambios: en el primer tiempo, 40′ Luan por Gustavo Gómez; en el segundo tiempo, en el inicio Breno Lopes por Scarpa, 23′ Santos por Ze Rafael, 36′ Kuscevic por Rocha y Veiga por Danilo; 41′ Julián Alvarez por De La Cruz y Casco por Angileri; 51′ Girotti por Pinola.

Incidencia: en el segundo tiempo, 28′ expulsado Robert Rojas.
Estadio: Allianz Parque (San Pablo).
Arbitro: Esteban Ostojich (Uruguay).