Nicolás Caputo, el único detenido por el ataque de un grupo neonazi al bar que administra un activista social, ya recuperó hoy la libertad y quedó acusado del delito de resistencia a la autoridad.

Según pudo confirmar LA CAPITAL de altas fuentes consultadas, luego de la detención, Caputo fue trasladado a la unidad 44 del penal de Batán, donde pasó algunas horas en prisión. Después fue llevado ante el fiscal de Flagrancia, Facundo De La Canale, donde se negó a declarar por el delito del que se lo acusa: “resistencia a la autoridad”. Una vez terminada la audiencia recuperó la libertad ya que el delito del que se lo acusa es excarcelable.
LA CAPITAL confirmó de fuentes judiciales que el sumario policial donde se detalla la detención de Caputo no menciona que la agresión al bar se produjo en el marco de un ataque neonazi. Sólo menciona que fue apresado por haber agredido a un policía con un palo.

De todas maneras, De La Canale dispuso que la policía registre todas las cámaras de seguridad de la zona para intentar identificar a otras personas que participaron del ataque y determinar si se produjo la comisión de otros delitos. De lograrse ese objetivo, el fiscal enviará la causa a la fiscalía en turno para que investigue a los sospechosos que formaron parte de la agresión. En caso de comprobarse que el caso ocurrió por la motivación de discriminar a un grupo de personas, la causa seguramente terminará en la justicia federal.

El hecho

El caso comenzó hoy a las seis de la mañana en el bar “Nevermind”, ubicado en Moreno y San Luis. En ese momento, una banda con reconocidos integrantes de una bandas neonazi de la ciudad comenzaron a destruir los vidrios de la entrada. “El lugar ya estaba cerrado y desde adentro comenzamos a sentir los ruidos de cómo rompían los vidrios del frente”, contó Javier Moreno, presidentede la Asociación Marplatense de Derechos a la Igualdad.
Y agregó: “El Rusito – neonazi que ya lo había amenazado de muerte- estaba con un arma en el medio de la calle, había otro con un cuchillo en la mano y el resto con palos con cemento. Nosotros podíamos ver todo desde el interior por las cámaras de seguridad. Tenemos más de 50 testigos de la agresión”.
En ese contexto, desde el bar denunciaron el hecho al 911 y poco después llegaron al lugar dos patrulleros del Comando de Prevención Comunitaria. Los efectivos intentaron dispersar a los agresores y en ese momento se produjo un enfrentamiento que finalizó con un policía herido en el brazo por el golpe de un palo El agresor, Nicolás Caputo, fue detenido y acusado sólo de resistencia a la autoridad. Caputo ya había sido denunciado en varias oportunidades por distintas organizaciones sociales por su participación en una banda neonazi.