Que se hace, que no se hace. Un día, avances, y al otro, retrocesos. Tras numerosas idas y vueltas al respecto, y cuando parecía más lejos que cerca, este miércoles, luego de una reunión clave, el regreso del superclásico del básquetbol marplatense proyectado a nivel nacional, es un hecho.

La fecha elegida, por cuestiones de organización y disponibilidad del escenario, es el viernes 30 de este mes, en el Polideportivo “Islas Malvinas”.

Una cuestión clave tenía estrecha relación con lo económico. Sabido es que el operativo policial requerido para un encuentro de esa envergadura exige no menos de 120 o 130 efectivos policiales, lo cual supone una precaución acaso justificada, pero muy costoso para las debilitadas arcas de los clubes.

La colaboración de la Municipalidad, que absorberá parte de ese monto, y la aparición de un sponsor, aceleraron las tratativas y posibilitaron el visto bueno para la concreción.

“Estaba difícil, pero todo parece indicar que lo vamos a hacer. Me parece muy oportuno. Es el año en que ambos clubes celebran su centenario y es el único gran clásico que le queda al básquetbol del país. Creo que es un momento histórico para que se vuelvan a enfrentar dos equipos con enorme trayectoria”, consideró Marcelo Jiménez, presidente de Quilmes.

Por su parte, Nicolás Lauría, vicepresidente de Peñarol, también celebró las buenas noticias. “Mi postura siempre fue 100% a favor de concretar el clásico. Estamos muy embalados y preparando los detalles organizativos y armando con Tato Rodríguez el equipo para el cruce entre las leyendas”, afirmó.

Más allá de alguna disparidad de fuerzas entre dos planteles que afrontarán competencias en niveles diferentes de categoría, lo más importante es que pueda volver a jugarse este clásico que supo entregar jornadas memorables para unos y otros. Será una ocasión súper especial para que la gente de ambas divisas pueda conocer mejor a los nuevos integrantes de los respectivos planteles antes de iniciarse la competencia oficial y, también de volver a jugar contra el clásico rival, una sensación que estaba aletargada.

Un atractivo adicional será, sin dudas, el partido entre Leyendas de ambas instituciones. Serán dos cuartos de 10 minutos cada uno, antes del partido principal. Y, aunque todavía falta, ya hay unas cuantas confirmaciones de ambos lados que generan un gran entusiasmo. Hasta aquí, estos son los nombres:

Peñarol: Marcelo Richotti, Héctor Haile, Lucas Picarelli, Tato Rodríguez, Fernando Rodríguez, Jorge González, Leonardo Zanassi, Eduardo Tabbia, Carlos Romano, Nicolás Lauría, Mariano Franco, Román González y Teodoro Michalópulos. Para el rol de director técnico hay algunos candidatos: el propio Richotti o Néstor “Che” García. En tanto, Juan Manuel Locatelli sería el asistente.

Quilmes: Alejandro Maffía, Eduardo Dominé, Pablo Gil, Leandro Ginóbili, Esteban De la Fuente, Alejandro Allegretti, César Rodríguez, Pedro Calderón, Claudio Chiappero y Marcelo Peralta. Todavía no se informó quién será el director técnico, aunque candidatos no faltan.