En Cabo Corrientes se alquila todo el kit y se brindan clases personalizadas. En el lugar funciona una guardería náutica que además realiza pesca embarcada.
Mientras multitudes se concentran en las playas de la ciudad en pleno enero para aprovechar el calor, algunos marplatenses y turistas buscan un descanso menos pasivo, optan por deportes acuáticos poco tradicionales y se vuelcan a tomar clases de kayak y stand up paddle (SUP) para adentrarse en el mar y hacer ejercicio.
Lejos del furor por el surf que hace años marca tendencia en la ciudad, en Mar del Plata funcionan escuelas de kayak y SUP que cautivan la atención y la curiosidad de locales y visitantes.
En “La bajada del Cabo”, junto al acceso a las playas de Cabo Corrientes, durante los 365 días se alquilan y se guardan equipos de kayak y stand up paddle, dos deportes que vienen creciendo con el tiempo.
Diego lleva más de 15 años al frente de la guardería náutica que funciona en el lugar, donde se brindan clases y se permite además guardar las tablas y motos de agua que muchos utilizan, principalmente en verano.
De la mañana hasta la última hora de la tarde, marplatenses y turistas encuentran allí la opción para aprender a realizar estos deportes acuáticos dentro de la bahía de Cabo Corrientes delimitada por un cordón de bollas de colores que delimitan el espacio.
“Los kayak se alquilan con bastante frecuencia. Es un deporte que tiene cierta dificultad, sobre todo en los días que el mar está revuelto. Pero puede aprenderse fácilmente y acá nosotros brindamos la instrucción”, comentó Facundo, trabajador de “La bajada del Cabo”.
Asistir a una clase y meterse con el kayak y todo el equipamiento por una hora cuesta allí entre 350 y 500 pesos, dependiendo de si el kayak es simple o doble.
“Hay gente que ya sabe y viene a relajarse un rato y se mete al agua. Nosotros les guardamos el equipo. Otros vienen por primera vez y les damos clases”, indicó.
Algo similar ocurre con el SUP, un deporte que lentamente fue ganando adeptos en los últimos años. La clase dura cerca de 90 minutos y el servicio contempla además la ducha, el traje y el equipo necesario, por 600 pesos.
“Hace más de 15 años que estamos en La bajada del Cabo, ofrecemos estacionamiento y funcionamos como guardería náutica. Estos últimos veranos no fueron buenos, porque la gente consume lo que es estrictamente necesario, pero de todos modos muchos vienen siempre y varios nos descubren por primera vez”, indicó Diego, responsable del lugar.
Pesca embarcada
Desde este espacio también se organizan partidas para realizar pesca embarcada. En este caso, se trata de un pequeño barco con capacidad para 6 personas que sale diariamente cerca de las 7 de la mañana y vuelve al caer la tarde.
La excursión incluye las cañas, la carnada, algún refrigerio y todo el kit de pesca por 2.500 pesos.
“Salimos todos los días y se ofrece una pesca variada en un rango de 10 kilómetros”, precisó Facundo, quien aseguró que el 80% de su clientela -para todas las opciones- es público de Mar del Plata, aunque también concurren muchos turistas.