El exprofesor denunciado de violar menores continúa internado
Carlos Barbini (72) sigue aprehendido en observación en el hospital de Balcarce para evitar que vuelva a intentar suicidarse. En los próximos días estará en condiciones de declarar. Está acusado de haber abusado de al menos 20 menores.
El exprofesor de Balcarce acusado de haber violado a varios menores en los últimos 20 años, Carlos Barboni (72), continúa aprehendido internado en el hospital de la vecina localidad y desde la fiscalía confían en que desde el lunes puedan tomarle la declaración indagatoria.
Barboni se encuentra internado desde que intentó suicidarse momentos antes de quedar detenido. El fiscal que investiga el hecho, Rodolfo Moure, solicitó que estuviera en observación permanente con profesionales capacitados para evitar que el acusado de diversas violaciones intente quitarse la vida nuevamente.
Por recomendación que los médicos de Balcarce, Moure debía esperar al menos 48 horas para intentar tomarle declaración indagatoria a Barbini, un lapso de tiempo que se termina el lunes. De todas maneras, el lunes se le realizará una nueva evaluación médica al imputado por “grooming, corrupción de menores, abuso sexual con acceso carnal, abuso sexual en grado de tentativa y una figura inédita en el Departamento Judicial Mar del Plata como es la promoción de la prostitución de un menor de edad” en la que se definirá si ya está en condiciones de hablar con la Justicia.
Por otra parte, los investigadores avanzan con los análisis del material secuestrado en el allanamiento de la casa de Barboni, principalmente en unidades de almacenamiento digital cuyo contenido podría aportar elementos probatorios para la causa.
La investigación
Días atrás el fiscal Moure inició la pesquisa a raíz de la denuncia de la madre de un adolescente de 14 años. La mujer descubrió que su hijo mantenía por facebook contacto con una persona cuyo perfil en la red social parecía ser falso.
El fiscal Moure pudo avanzar por distintos caminos hasta establecer que el perfil era usado por el exprofesor y que previamente ya se había encontrado con el menor e insistía en verse de nuevo. La orden fue mantener el contacto y se siguiera el plan del hombre. Al mismo tiempo se solicitó una orden de allanamiento para la casa en la que Barboni vivía junto a su esposa.
Entonces entró en acción la SubDDI de Balcarce y la policía de esa localidad que montaron un operativo encubierto en la zona del falso encuentro con el menor. Sin embargo, en esos momentos vieron que Barboni hizo ascender a su vehículo Toyota Corolla a dos jóvenes. Los policías consultaron al fiscal, quien ordenó interceptar el rodado.
La escena fue asombrosa: mientras manejaba, el hombre recibía sexo oral de uno de los jóvenes. El otro estaba sentado en el asiento trasero. Debido a que no había ningún delito en esa acción -los acompañantes eran mayores de edad- no hubo ninguna detención.
A la vez otra comisión policial allanaba la casa del ex profesor, de donde lograban secuestrar algunos elementos de importancia para la causa. Una computadora y un teléfono celular.
Segunda denuncia
El caso tomó trascendencia social en Balcarce y eso animó a un hombre de 30 años a presentarse ante el fiscal Moure a contar su historia. “Sucedió cuando tenía 15 años”, dijo y contó una serie de detalles de gran importancia para la investigación.
Barboni seguía en libertad, pero Moure volvió a pedir un allanamiento a la casa ante el relato preciso de la nueva víctima: aseguró que había un escondite secreto en un mueble donde el exprofesor guardaba objetos sexuales.
El juez Tapia dio el allanamiento y el jueves a la tarde la policía irrumpió nuevamente en la casa de Barboni. Esta vez buscaron en dicho mueble y dieron con lo descrito por la víctima.
También dieron con gran cantidad de correos electrónics impresos en los que se reproducían diálogos con menores de Balcarce y Mar del Plata, como también comunicaciones de chats.
El exprofesor usaba el seudónimo “Juan Salvador Gaviota” o “Joaquín Barbarrosa”, nombres literarios de los que hacía alarde porque en esos momentos era docente secundario.
La maniobra de captación consistía, según la investigación, en hacerse amigo y posteriormente realizar un juego en el que las víctimas tenían que encontrar dinero que les dejaba en plaza Libertad. Así ganaba su confianza y luego coordinaba un encuentro en el que les proponía mantener sexo con él a cambio de dinero.
Barboni desapareció en la tarde del jueves al enterarse del nuevo allanamiento en su casa y por la noche se comunicó con su esposa para adelantarle que tenía pensado suicidarse.
La mujer se dirigió entonces a una dependencia policial donde hizo la denuncia por averiguación de paradero y personal de la Patrulla Rural inició la búsqueda por caminos periféricos. Pasadas las 6 de la mañana avistaron el Toyota Corolla en un camino vecinal que conduce a un campo propiedad de Barboni. Los policías se acercaron y lo descubrieron en una zanja. Había ingerido pastillas para quitarse la vida.