La muerte de Iván, el marplatense de 12 años que sufría bullying en una escuela de Cataluña por autopercibirse varón, fue calificado como un “asesinato social” por el Observatorio Contra la Homofobia de Cataluña y solicitaron que se inicie una investigación de oficio.

“Una noticia que nos rompe el corazón, un niño trans de 12 años se suicidó en Sallent. Una muerte marcada por la intolerancia, el bullying y la transfobia”, expresaron desde el Observatorio Contra la Homofobia de Cataluña, desde donde se ofrecieron a acompañar a la familia de Iván y de su hermana gemela, quien continúa internada, y se pusieron a disposición para acompañarlos en todos los aspectos jurídicos y psicosociales necesarios.

Además, el Observatorio Contra la Homofobia solicitó al Síndic de Greuges de Cataluña (Síndico de Agravios) que inicien una investigación de oficio por lo ocurrido.

A los pedidos de investigación también se sumó la diputada Basha Changue, quien solicitó que desde el área de Educación de Cataluña den explicaciones sobre la “aplicación del protocolo de prevención de violencias entre iguales y, en concreto, cómo se ha aplicado en el caso de Iván”.

“Los casos de violencia siempre son ‘multifactoriales’. Es necesario esclarecer porque en el acompañamiento a Iván y su hermana desde inicio de curso no se detectó el bullying transfóbico que las familias y otros alumnos señalan”, expresó la diputada en sus redes.

Comunicado del Síndic de Greuges de Cataluña

Desde el Síndic de Greuges de Cataluña expresaron que se dirigirán al Departamento de Educación y al Ayuntamiento de Sallent, para solicitar “información sobre si el instituto tenía conocimiento de alguna situación de posible acoso hacia las dos hermanas o si se había detectado malestar emocional, y qué actuaciones se habían emprendido, en su caso. También se preguntará a los servicios sociales si conocían y hacían seguimiento de la familia afectada, y, en caso afirmativo, qué valoración hacen de su situación”.

“Es muy preocupante la situación de la salud mental de los niños y adolescentes, puesto que los datos muestran un incremento de su malestar emocional, especialmente desde la pandemia. En este sentido, los indicadores de bienestar subjetivo infantil que contiene la Encuesta de salud de Cataluña (ESCA) muestran en los últimos cinco años un incremento sostenido de la probabilidad de sufrir problemas de salud mental. Desde el año 2017 hasta el año 2020, esta probabilidad ha pasado del 5,1% al 10,6%”, remarcaron.