El municipio depositó el 30% restante de los sueldos de enero y el STM (Sindicato de Trabajadores Municipales) levantó la retención de tareas que había comenzado desde las 0 horas de hoy, aunque se mantienen las negociaciones por las horas extras.

La medida de fuerza se había decretado ante la intención del Ejecutivo de hacer un pago desdoblado de los salarios. Al final, el gobierno local depositó ayer el 70% de los haberes y completó hoy el 30% que faltaba, lo que destrabó el conflicto: los servicios funcionarán con normalidad este jueves.

En un principio, la gestión local analizó hacer un pago diferido por las dificultades con la recaudación, afectada por el contexto de inflación alta de los últimos 4 años y la actualización de tasas, que en el último tiempo se ubicó por debajo de lo que aumentaron los precios.

El municipio encontró la solución tras acudir a un nuevo giro en descubierto del Banco Provincia -cuyo monto aún no trascendió- para poder afrontar la totalidad de los salarios. “Se utilizó para no desdoblar el pago y tener que esperar una semana para que se acredite lo que faltaba”, señalaron desde el Ejecutivo, que barajó la posibilidad de abonar el 30% adeudado recién el próximo 15 de febrero.

En efecto, si se hubiera mantenido la medida de fuerza, habría complicado los servicios de la ciudad durante las celebraciones por su 150° aniversario, que se llevarán a cabo a lo largo de todo el fin de semana largo.

A inicios de enero, la comuna ya había solicitado un giro en descubierto al Banco Provincia por $4.200 millones para hacer frente al pago de los salarios de diciembre, aunque finalmente sólo utilizó $976 millones. Los fondos ya fueron devueltos, según informaron desde la comuna.

Por otro lado, siguen las negociaciones por las horas extras. “Se están realizando las presentaciones pertinentes ante el Ministerio de Trabajo, a la espera de una respuesta por parte del Ejecutivo”, señalaron desde el STM.

La gestión local maneja como fecha tentativa el 21 de febrero para cancelar dicha obligación. De todos modos, las partes mantendrán este jueves una audiencia en la cartera de Trabajo para acercar posiciones.

La tardanza en el pago de las horas extras -señalaron fuentes oficiales- se debe a que la comuna está realizando una auditoría interna para rastrear cómo se reparten en cada área y a qué tipo de trabajador (qué tareas realiza, su módulo horario, etcétera).

“Es una decisión que se tomó en el marco de la austeridad y el reordenamiento de los recursos municipales, cotejando con la carga horaria de cada agente”, precisaron desde el Gabinete.