El municipio envió al Concejo el pliego de licitación de Playa Chica
Es el proyecto relacionado con las unidades turísticas fiscales que más se esperaba. El estado del lugar es deplorable. Intentarán concesionarlo por 15 años con una posible prórroga de otros cinco.
Dos años después de que Gustavo Pulti decretara la caducidad del concesionario de Playa Chica, el gobierno municipal envió al Concejo Deliberante el pliego de bases y condiciones para poner en valor esa unidad turística fiscal, que desde entonces exhibe una imagen de completo abandono.
El proceso licitatorio que promueve el Ente Municipal de Turismo (Emtur) comprende la revisión de la estructura edilicia, funcional y económica de la Unidad Turística Fiscal Playa Chica. En ese sentido, los oferentes deberán elevar una propuesta turística integral con un proyecto arquitectónico y urbanístico y un plan de desarrollo de servicios.
La propuesta del municipio, que será considerada por el cuerpo legislativo, es que la concesión se extienda durante 15 años con una opción de prórroga de cinco. El precio oficial de la concesión fue establecido en 418.000 pesos, mientras que los oferentes podrán ofrecer un canon anual igual o superior.
El Emtur puntualiza que el proyecto integral deberá contener la “reestructuración integral de la unidad, con predominio y tratamiento de los espacios públicos vinculados con el Boulevard Marítimo, para lo cual deberá focalizarse en la generación de áreas con accesibilidad universal pública, equipamiento urbano e integración formal y física de la unidad al espacio público urbano”.
También tendrá que contemplar la “remediación de toda la barranca intervenida con arquitectura edilicia preexistente”, para lo cual “deberá formularse un plan integral de remediación del macizo rocoso” y “del sector medio”.
No podrá faltar el “desarrollo de una propuesta arquitectónica sustentable ambiental con incorporación de espacios de uso público y plan de mantenimiento general”, ni una “propuesta integral de equipamiento urbano, consistente en instalación de bancos, luminarias, cestos de residuos, bicicleteros, áreas recreativas, estaciones de acondicionamiento físico”, entre otras.
El pliego establece “la demolición completa de los edificios existentes y el retiro de la totalidad del material de escombro resultante, en virtud de las condiciones de extrema precariedad” en las que se encuentran.
Se prevé que la actividad principal sea la gastronomía. A la vez, los oferentes podrán proponer “otras actividades de régimen anual”, es decir, con usos que aseguren el funcionamiento durante todo el año.
Aclara que “no se admitirán situaciones de precariedad física y/o funcional” y “deberá contar con equipamiento y personal profesional idóneo para la actividad propuesta y estándares de primera calidad”. Será obligación del concesionario “mantener las actividades principales y los sanitarios públicos” en funcionamiento durante todo el año. La gestión anterior decretó la caducidad del contrato de concesión de Playa Chica el 19 de marzo de 2015. En mayo de ese año, el municipio, entonces a cargo de Pulti, tomó posesión de la unidad tras acusar al ex concesionario de dejarla “en estado de abandono”. Como contrapartida, el ex concesionario, Gerardo Fernández, presentó una serie de denuncias penales contra las autoridades municipales.
La anterior administración prometió entonces enviar un nuevo pliego licitatorio al Concejo, pero no llegó a hacerlo.
Objetivos
Localizada en el Boulevard Marítimo Peralta Ramos entre las proyecciones de las calles Gascón y Castelli, el sector “se encuentra afectado en forma colateral por varios emprendimientos que han transformado la estructura urbana general del sector”, argumenta el Emtur, y cita como ejemplos el Complejo Edilicio Maral Explanada, el Parque San Martín y el Complejo Playa Grande.
En este contexto, el llamado a licitación “pretende aportar al sector una revisión integral de las condiciones actuales de la unidad que a través de una propuesta integral de intervención incorpore a la unidad licitada en el proceso de actualización en marcha”.
“Como elementos a recuperar de lo urbano se prevé la revisión de la provisión de servicios y espacios públicos, reparos, iluminación, equipamiento, infraestructura y, como valor agregado, el impulso de proponer al sector como zona segura, garantizando la seguridad personal y de los bienes”, subraya.
Otorga un apartado especial a los accesos peatonales, pues considera necesaria “la revisión del sistema de circulación peatonal, tanto el que se da en forma vertical como a través de las circulaciones paralelas a las vías vehiculares”. En esa línea, “el sector reconoce como falencia la permeabilidad peatonal, y será un objetivo a cumplimentar la creación de nuevos accesos y bajadas que vinculen el boulevard marítimo con el sector y logren dar alternativas circulatorias peatonales accesibles”.
Según el Emtur, “con la renovación y actualización de la propuesta turística integral de todo el año se apunta a mejorar, jerarquizar y enriquecer los usos y alternativas de actividades para los próximos años”.
Pese a que el gobierno nacional los eliminó, el ente destaca que con los feriados puente, las escapadas de fin de semana y la provisión de usos y servicios anuales para locales y turistas “se modifica la vieja postura de ‘sol y playa'”.
Por lo tanto, “la propuesta para el sector se sostiene en el desarrollo de usos variados, complementarios entre sí, que abarquen los rubros gastronómico, comercial, deportivo, recreativo y de servicios que satisfaga los objetivos de generar un flujo de usuarios durante todo el año al sector y extender a la noche la plena vigencia y convocatoria para marplatenses y turistas”.