El municipio continúa con los pasos administrativos para lograr el objetivo de licitar dos balnearios de la zona sur de Mar del Plata, específicamente Playa Redonda y Santa Isabel.

Las propuestas, que ya fueron aprobadas de manera conjunta a mediados de enero en la Comisión de Turismo del Concejo Deliberante, se tratarán este lunes en la Comisión de Legislación, que tiene previsto reunirse a las 11. Los expedientes fueron incorporados en el orden del día, y en caso de ser acompañados por los concejales, serían discutidos en la próxima sesión.

A través de esta licitación, el Ejecutivo busca autorizar la convocatoria para el “desarrollo y modernización” de estos balnearios, con la participación del Ente Municipal de Turismo y Cultura (Emturyc), que se encargaría de confeccionar el pliego de bases y condiciones para el proceso.

En cuanto a los espacios que el municipio tiene en la mira, Playa Redonda está ubicada en el kilómetro 16 de la ruta 11, y actualmente es administrada por la Asociación Civil Marplatenses Conservacionistas, que posee un permiso precario que vence en abril de este año.

En su momento, Playa Redonda era conocida como el “Rancho Móvil”, donde en 2019 se generó una fuerte polémica por construcciones sobre la playa que fueron removidas por la Comuna en medio de un escándalo.

En esta playa, además, existen varias “cuevas” entre los acantilados que datan de la prehistoria, por lo que la zona tiene un fuerte valor paleontológico.

Hace cinco años, durante unas vacaciones en Mar del Plata, Cielo, una niña que visitaba el Museo de Ciencias Naturales Lorenzo Scaglia, identificó restos fósiles de un gliptodonte en Playa Redonda, una especie prehistórica de hace más de 120 mil años. Los restos, correspondientes al caparazón dorsal de un Neosclerocalyptus, fueron recuperados por un equipo del museo, que está investigando estos animales y su relación con las cuevas prehistóricas de la zona, que esconden historias y misterios sobre la ciudad.

Por su parte, Santa Isabel, ubicada en el kilómetro 18 de la misma ruta, se encuentra sin ocupantes en este momento. La playa constituye la salida directa a la costa desde el barrio ubicado a la vera de la ruta 11 que lleva el mismo nombre, y está en medio de los acantilados.

En la parte superior, este sector cuenta con varias construcciones en desuso y estado de abandono desde hace algunos años. En el acceso, además, hay un cartel que señala el “peligro de derrumbe”. 

En la playa Santa Isabel también es posible encontrar algunas cuevas entre las formaciones rocosas de los acantilados, debido a que se encuentra ubicada en la misma zona que la anterior, con apenas dos kilómetros de distancia entre sí.

Con idénticos argumentos en los proyectos, para los cuales aún no hay pliego, la propuesta del municipio es desarrollar el sector donde se encuentran los balnearios a través de una licitación pública que “contribuya a la recuperación del predio, a generar nuevas oportunidades de empleo, modernizar los servicios que el sector brinda a la comunidad y a sus visitantes, la diversificación de la oferta turística, y el fomento de actividades durante todo el año”.

El municipio subraya que estas licitaciones “contribuirían sin duda al posicionamiento de la zona sur de la ciudad, sin perder las cualidades físicas y ambientales que caracterizan la unidad fiscal”, según se resalta en los expedientes.

En caso de que, tal como se espera, el Concejo Deliberante termine aprobando ambas licitaciones, el Emturyc será el encargado de elaborar los pliegos para iniciar el proceso de licitación, lo que abriría la puerta a una nueva etapa de explotación de ambas playas en la zona sur.