El marplatense Ezequiel Acosta, de promisoria carrera, defenderá su invicto el sábado en la histórica velada que marcará el regreso del boxeo al mítico Luna Park.

Acosta, que ganó sus ocho combates en el profesionalismo con seis nócauts en su haber, le dará revancha a Cristihan Osmar Fernández, a quien ya noqueó en enero de 2020 en Mar del Plata.

“El León” Acosta, de 25 años y 1,94 metros, viene de vencer en desición unánime en septiembre a José Luis Yana.
Acosta debutó en abril de 2019 venciendo por puntos a Emanuel Prado y luego noqueó a Walter Hermosi, Gustavo Domínguez, Christian Fernández, Sergio Córdoba, Fabio Barros y Franco Quintero (los tres últimos en 2021), antes de su última aparición ante Yana.

El combate revancha ante Fernández será a ocho rounds en la categoría medio pesados, en el marco de una velada organizada por Osvaldo Rivero que contará entre otras peleas, con la presentación de Marcela “Tigresa” Acuña.
Ezequiel Acosta es el hijo mayor de Rubén “Siru” Acosta, el reconocido boxeador marplatense que sigue vigente entre los medio pesados.

“Esta pelea puede ser el despegue para Ezequiel. Hizo una preparación muy completa y eso se va a ver el sábado arriba del ring”, sostuvo en diálogo con LA CAPITAL “Siru”, padre y entrenador del invicto marplatense.

Ezequiel trabajó en triple turno con un completo equipo de profesionales que incluye psicólogo deportivo, nutricionista y al preparador físico Marcos Acosta, viajará mañana a Capital Federal para aguardar el pesaje del viernes y la pelea del sábado.

“Es muy importante el apoyo que nos da Juan Inza para trabajar tranquilos”, agradeció Siru.
Acosta padre valoró la oportunidad que significa poder pelear en el Luna Park y la posibilidad de darle mayor exposición al muy buen trabajo que viene realizando Ezequiel.

Por último, a la hora de destacar las principales virtudes boxísticas de Ezequiel, Rubén aseguró “el temple que tiene arriba del ring, la tranquilidad para definir una pelea y la justeza de sus golpes”.