No solo las murgas celebraron la llegada del Carnaval. Los empresarios vinculados al turismo de la ciudad recibieron el fin de semana de cuatro días con expectativas altas, en el último tramo de una temporada de verano que no arrojó los resultados esperados.

Sin embargo, pese a la amenaza que generaba la cercanía del inicio del ciclo lectivo, desde los balnearios, hoteles e inmobiliarias aseguraron que estos días alcanzaron por momentos altos índices de ocupación y se trabajó a un “buen ritmo”. “Una extensión de febrero, que fue muy bueno”, aseguraron algunos consultados por LA CAPITAL.

Es que con temperaturas elevadas y las playas repletas, la primera quincena hizo que el recuerdo de febreros lluviosos y nublados quedaran en el pasado para dar lugar a jornadas con máximas récord y postales de la ciudad en plena temporada.

De todas maneras, la algarabía duró poco y fue cuestión de un frente frío para empezar a vivir un invierno en verano y un promedio de 17° diarios, que no hacían más que hacer peligrar los buenos balances del mes y a obligar a sacar del fondo del placard ese abrigo que quedó disponible.

De todas maneras, los números muestran que la gente hizo caso omiso a los pronósticos y se volcó a la costa igual, para disfrutar, quizá, no solo de las bondades de una ciudad balnearia sino también de una multiplicidad de atracciones que tuvieron sede este fin de semana.

Entre las más destacadas estuvieron el Gran Corso en Plaza España, con su golpe de calor y ritmo; el “Circuito del Torreón del Monje”, en el que se recordaron los 70 años del primer triunfo internacional de Juan Manuel Fangio; la posibilidad de visitar a la Fragata Libertad, en su paso por la ciudad después de tres años; y el gran despliegue cultural que tuvo lugar con motivo del centenario de la banda sinfónica municipal, de las más antiguas del país.

Esto hizo que los operadores turísticos no escondieran su entusiasmo ante los balances positivos de varios sectores.

Miguel Ángel Donsini, presidente del Colegio de Martilleros de la ciudad, aseguró que los balances preliminares marcaron un promedio de ocupación del 80%, sobre todo en viviendas céntricas. “Fue un buen fin de semana para una temporada que no estuvo al 100%”, señaló a LA CAPITAL.

Según indicó, el descanso “xl” sirvió para “extender febrero”, un mes que fue, en sus primeras semanas, “muy bueno”.

En la misma línea que las inmobiliarias, los alojamientos hoteleros volvieron a poblarse. Si bien desde la Asociación Empresaria Hotelera Gastronómica (AEHG) dijeron no tener aún los números finales, previo al inicio del fin de semana ya advertían que las reservas alcanzaban entre un 80% y 90% en algunos establecimientos.

Los balnearios, favorecidos por la ausencia de lluvias y tormentas y temperaturas que a lo largo del fin de semana mutaron de templadas a cálidas, también vieron con buenos ojos las planillas del fin de semana.

Desde la Cámara de Balnearios aseguraron que el único día que se trabajo “fuerte” fue el domingo y hubo algunos puntos neurálgicos de la costa marplatense, como Playa Grande, Varese y La Perla, en los empresarios aseguraron que hubo picos de ocupación del 90%. El sur, este martes, volvió a invitar a familias enteras -en su mayoría marplatenses- a disfrutar de una jornada completa a orillas del mar.

“El día más significativo para los balnearios fue sin duda el domingo. El sábado y el lunes se trabajo flojo, por una cuestión climatológico; el martes se vio mucho movimiento, consulta y alquileres, pero no a los niveles del domingo”, indicó el empresario del sector, Pablo Philapsidis.

Los profesionales del volante, por su parte, levantaron el pulgar al ser consultados por los resultados que arrojaron los festejos de Carnaval.

Raúl Vicente, de Servitaxi, aseguró que “vino mucha gente” a la ciudad y que el promedio de gasto fue “superior” al que se tuvo durante enero.

“Se trabajó muchísimo, sobre todo en horario nocturno y en las zonas donde hubo espectáculos, como los corsos en Plaza España. El balance, para los taxistas, fue definitivamente muy positivo”, indicó.

Volver con calor

Justo cuando se pone bueno. Si bien el fin de semana permitió que locales y “extranjeros” pisaran la arena y vislumbraran el mar, las temperaturas veraniegas y el cielo despejado llegó el último día, lo que podría pensarse como una estrategia de la naturaleza para que la gente vuelva.

Lo cierto es que el movimiento de comenzó a percibirse en las primeras horas del día, cuando la autovía 2 y la terminal de ómnibus empezaron a vivir el mismo ritmo intenso del viernes.

En la estación de San Juan y Luro los servicios programados para ayer eran 645, aunque los adicionales ya para el mediodía superaban los 160 colectivos.

El dato que no llega

Lo que se desconoce hasta el momento es cuántos turistas eligieron Mar del Plata como destino de descanso. En realidad, tampoco se sabe cuántos lo hicieron a lo largo de todo el verano.

Es que desde que el Ente Municipal de Turismo (Emtur) informó que en la primera quincena de enero vinieron 32.000 turistas menos que el año pasado, el dato más esperado y fundamental para medir el éxito o fracaso de una temporada no salió a luz.

Ni siquiera fin de semanas que aparentaron alcanzar buenos niveles de arribos, como el de Carnaval. Quizás habrá que esperar hasta finales de temporada.