La “manteada” liderada por Diego Gerbaudo cerró el festejo de los jugadores de Peñarol en el centro de la cancha de Obras. El destinatario, Tomás Monacchi, recibió los cariñosos golpes con felicidad. Instantes antes había cuajado ante Argentino de Junín uno de los mejores partidos de su carrera en la Liga Nacional de Básquetbol, justo el día de su cumpleaños N° 23.

El alero marplatense lideró con 24 puntos una muy buena producción de los suyos para vencer 92-71 a Argentino de Junín, habitualmente incómodo rival, por la tercera fecha de la Conferencia Sur.

La marca fue la mejor de Monacchi desde que juega la Liga. “En el partido que más había anotado, había conseguido 18 o 19 puntos, no lo recuerdo bien. ¿Qué significa? Me pone muy contento. Creo que es un premio para todo el esfuerzo que hice por mejorar”, le dijo por la tarde a LA CAPITAL.

“Fue raro para mí pasar un cumpleaños lejos de la familia. En realidad, es todo raro lo que estamos viviendo. Hablé con todos en casa después del partido. Si bien estamos acostumbrados a los viajes y a las separaciones, esta será por cerca de cuarenta días. Pienso que hacia el final se los extrañará bastante”, confió.

Monacchi aseguró que llegó “naturalmente” a su récord de puntos. “Me parece que fue una consecuencia de lo mucho y bien que se pasó la pelota el equipo. Y me favoreció mucho jugar algunos pasajes de “4” porque era más rápido que mi emparejamiento”, explicó.

La nueva temporada es nueva de verdad para Tomás, que ya había sido tremendamente importante en el éxito inicial de Peñarol ante Platense.

Hasta antes de ese partido había jugado 93 partidos en la Liga Nacional con promedios de casi 9 minutos, 2,61 puntos, 2,13 tiros de cancha lanzados, 0,90 rebotes, 0,32 asistencias y 0.25 pelotas recuperadas por partido.

Si bien esos números son relativos porque habitualmente en el primer par de temporadas los juveniles juegan minutos residuales, el crecimiento es significativo también en relación al torneo anterior.

Monacchi, que tuvo picos de rendimiento muy interesantes con Leonardo Gutiérrez al mando del equipo, durante la gestión de Gabriel Piccato, en 23 partidos, promedió 9,50 minutos, 2,7 puntos, 2,3 tiros de cancha intentados, 1,4 rebotes, 0,1 asistencias y 0,2 balones recuperados. No demasiado por encima de sus promedios globales.

En estos tres cotejos, sin embargo, Tomás promedió 27,3 minutos en cancha, 16,3 puntos (11,3 intentos de cancha), 4,3 rebotes, 2,3 asistencias y 3 pelotas recuperadas. Él le da parte del crédito a Carlos Romano. “Me siento confiado, el ‘Negro’ es de empujarme para adelante”, sentenció.

Más allá de lo individual, la felicidad para él fue completa por la producción del equipo. “Jugamos mucho mejor que con Obras, también tuvimos un poco más de tiempo para entrenar. Este fue el mejor de los tres partidos. Me parece que vamos definiendo una identidad. Estuvimos bien defensivamente, Peñarol se va a basar mucho esta temporada en lo que pueda producir con su defensa para luego correr“, afirmó.

Argentino se nubló entre el primer y segundo cuarto contra la zona de Peñarol. Cuando quiso reaccionar, ya estaba muy atrás en el marcador. “La defensa zonal hoy nos dio buenos resultados, la veníamos entrenando, es una variante interesante para algunos momentos”, ahondó.

Más allá de la contundencia del contraataque del equipo, Monacchi también destacó algunos pasajes de la ofensiva fija. “Franco Penacchiotti pasó bien la pelota, creo que cuando va de “4” se hace más importante”, elogió al pivote bahiense, quien cuajó 12 puntos, 13 rebotes y 6 asistencias.

Y también destacó los papeles de Diego Gerbaudo y Guido Mariani. “Diego nos cambia el ritmo, nos da tranquilidad y Guido entró muy certero. Metió tiros claves cuando Argentino arrimaba”, puntualizó.

Aunque todo es muy prematuro, los resultados alientan y el grupo se arma. “Aunque buena parte del día se pasa en las habitaciones, aprovechamos mucho los momentos que pasamos en el comedor, la hora que tenemos en el gimnasio y en una sala de estar en el hotel y en las prácticas. El Negro hace mucho hincapie en la relación grupal y, por ahora, lo estamos pasando bien”, finalizó.