VILLA GESELL (Corresponsal).- Tal como habían adelantado, los bloques opositores del Concejo Deliberante de Villa Gesell rechazaron este lunes por la noche el proyecto para la creación de un parque nacional y, así, desestimaron la iniciativa llevada adelante por el intendente Gustavo Barrera (FPV).

Los ediles de Cambiemos, UNA y el PJ-FPV decidieron frenar la cesión de tierras de la reserva natural municipal Faro Querandí a la Administración de Parques Nacionales (APN) y cuestionaron la confección del expediente así como el objeto de “entregar” las 5.700 hectáreas perdiéndose la posibilidad de tomar decisiones en el futuro.

El radical Jorge Martínez Salas aseguró en la sesión especial desarrollada en el recinto del HCD que “hay mucho para discutir pero la decisión de ceder las tierras es la peor de todas, nos dejaría sin la posibilidad de tomar ninguna decisión al respecto” y consideró que “nos deja sin una parte de nuestra identidad, la historia de nuestro fundador está íntimamente ligada a esto”.

Salas criticó que “el proyecto es preocupantemente escueto, sólo media página, son cuatro artículos donde plantea la cesión lisa y llana de las 5.700 hectáreas”. Además, sostuvo que el municipio “el 1 de abril inició un expediente y ese día el intendente lo elevó al Concejo Deliberante, tenía la necesidad imperiosa de anunciar algo en la apertura de sesiones ordinarias”.

Si bien reconoció que “es el momento de nuevas decisiones políticas” y rescató que “este proyecto ha tenido la virtud de volvernos a plantearnos los objetivos de la conservación” manifestó que “el proyecto con ese trámite arrancó mal”.
A su turno, su compañera de bancada, Rosa Estanga, apuntó a Barrera y pidió que “ojalá le ponga las mismas energías de este proyecto a resolver todos los problemas que tienen los geselinos”.

Antes, la concejal Florencia de Cabo (FPV y cercana al intendente Barrera), intentó convencer a sus pares, aunque sin éxito, en defensa del proyecto. Repasó que la iniciativa pretendía “elevar el nivel de protección de la reserva por amenazas a la conservación del lugar” y enumeró el uso más intenso que generaría el avance urbano por los desarrollos inmobiliarios cercanos, el tránsito vehicular en la zona y la caza.

También, dijo que la reserva “forma parte de un ambiente mayor que incluye la laguna de Mar Chiquita y varios sitios más” y resaltó el “fundamental” valor hídrico que representa. Incluso, manifestó el acompañamiento de la Fundación Vida Silvestre que envió al recinto una nota de adhesión a la propuesta.

En el mismo sentido, el concejal Ignacio Paganini había anticipado antes de la sesión que “puede ser un paso muy importante para la ciudad porque podemos formar parte del ciclo turístico internacional de parques nacionales y además es fundamental tener esta parte de nuestro territorio protegido y cuidado por las agencias más importantes de preservación ambiental a nivel mundial”.