El Concejo Deliberante aprobó un aumento de tasas del 35%
Votaron a favor de la suba la Agrupación Atlántica, el radicalismo, Pro y Crear. Se opusieron Unidad Ciudadana, Acción Marplatense y el Frente Renovador.
El Concejo Deliberante aprobó hoy por mayoría un aumento del 35 por ciento para la Tasa de Servicios Urbanos (TSU). Lo hizo con los votos afirmativos de la Agrupación Atlántica y Cambienos. En cambio, el Frente Renovador, Unidad Ciudadana y Acción Marplatense se opusieron a la suba.
La sesión comenzó con ocho horas de demora y después de muchas idas y vueltas, negociaciones, “rosca” y hasta ausencias (como las de los concejales Santiago Bonifatti, Daniel Rodriguez y Mario Rodriguez) lograron aprobar la ordenanza fiscal e impositiva donde se contemplaba la suba de la TSU.
Para que el aumento entre en vigencia, aún resta que la medida sea aprobada en la Asamblea de Mayores Contribuyentes, que deberá llamarse dentro de ocho días. Así, el Ejecutivo podrá emitir nuevas facturas de la TSU para los últimos cuatro meses del año.
El debate comenzó con el presidente del bloque de Agrupación Atlántica, Guillermo Arroyo, quien defendió el aumento a pesar de su lamento por “el contexto en el que se encuentra el país”. Luego, la radical Cristina Coria argumentó el acompañamiento de su bloque: adujo que el porcentaje -de acuerdo a sus cálculos- debería ser del 35 por ciento, bajando dos puntos a lo estipulado por el secretario de Ecoomía y Finanzas de la comuna, Hernán Mourelle. Otro de los ediles que expresó verbalmente su apoyo fue Alejandro Carrancio, de Crear.
Desde la bancada de enfrente, el presidente del bloque del Frente Renovador, Ariel Ciano, adelantó que votarían “por la negativa” debido a “la situación crítica” en la que se encuentra el país y a la “falta de la ordenanza complementaria”. “No nos parece que en este contexto en que se encuentra el país debamos aumentar las tasas, más en una gestión que se está por terminar”, sostuvo.
Desde Acción Marplatense, Claudia Alejandra Rodríguez, se expresó en sintonía y adelantó “el voto negativo”. Además se quejó: “Ya sabemos que este gobierno no escucha, no entiende, no quiere. El intendente repite conceptos que no son verdad”.
A su turno, Virginia Sívori, de Unidad Ciudadana, consideró: “Estamos votando herramientas importantes, una ordenanza para el ordenamiento de Mar del Plata y se pierde la oportunidad de hacerlo bien”. Además, se quejó porque “está terminando agosto y acá se trabaja sobre conceptos anuales” y adelantó que su bloque votaba “por la negativa”.
Luego de algunas chicanas verbales, finalmente los concejales votaron y por mayoría se aprobó el aumento y se pasó a un cuarto intermedio hasta el lunes.
Más temprano
La jornada tuvo intensas negociaciones en las que quedó en claro la falta de consenso del bloque del intendente -la Agrupación Atlántica- con el radicalismo, que promovía la reducción de los porcentajes aprobados en la comisión de Hacienda.
La demora de la sesión tenía una sola explicación: al oficialismo no le alcanzaban los votos para imponer el proyecto. Por eso hubo reuniones a toda hora en las que también participaron funcionarios del Ejecutivo. Es que el intendente también se había manifestado en favor de una disminución de los incrementos proyectados a fines del año pasado.
El principal encuentro tuvo lugar en el despacho del intendente. Participaron concejales de la UCR, la Agrupación Atlántica e incluso algún opositor. Allí se habló de un incremento promedio de 35% en la TSU, pero el radicalismo ya había advertido que no se movería de una cifra superior al 30%. Así lo había adelantado en la comisión de Hacienda Cristina Coria. También sostenía la necesidad de que los aumentos en los mínimos de Seguridad e Higiene –la tasa que pagan comercios e industrias– no fueran retroactivos.
La concejal de Unidad Ciudadana, Virginia Sívori, ironizó en las primeras horas de la tarde sobre las negociaciones. “Este tema se está tratando como una subasta pública”, dijo a Canal 10 con relación a los porcentajes de incremento que cada bancada iba arrojando.
No faltaron los chispazos públicos. El secretario de Economía y Hacienda, Hernán Mourelle, les pidió “responsabilidad” a los concejales. Dijo que hasta el momento no la había visto. Y mencionó que el municipio pierde “$ 60 millones por mes” mientras se demora la aplicación de un aumento de tasas. “Se podrían asfaltar 60 cuadras por mes”, deslizó en declaraciones a la FM 102.1.
Coria, en cambio, responsabilizó a Mourelle de ponerle palos al consenso. “Hay algunos funcionarios del Ejecutivo, sobre todo el secretario de Hacienda, que parece que está todo el tiempo intentando dinamitar la posibilidad de un tratamiento. Tengo dudas de si él quiere hacer un buen trabajo para el intendente o cuáles son sus objetivos realmente”, disparó en loquepasa.net.%. Así lo
La jornada tuvo intensas negociaciones en las que quedó en claro la falta de consenso del bloque del intendente –la Agrupación Atlántica– con el radicalismo, que promovía la reducción de los porcentajes aprobados en la comisión de Hacienda.
La demora de la sesión tenía una sola explicación: al oficialismo no le alcanzaban los votos para imponer el proyecto. Por eso hubo reuniones a toda hora en las que también participaron funcionarios del Ejecutivo. Es que el intendente también se había manifestado en favor de una disminución de los incrementos proyectados a fines del año pasado.
El principal encuentro tuvo lugar en el despacho del intendente. Participaron concejales de la UCR, la Agrupación Atlántica e incluso algún opositor. Allí se habló de un incremento promedio de 35% en la TSU, pero el radicalismo ya había advertido que no se movería de una cifra superior al 30%. Así lo había adelantado en la comisión de Hacienda Cristina Coria. También sostenía la necesidad de que los aumentos en los mínimos de Seguridad e Higiene –la tasa que pagan comercios e industrias– no fueran retroactivos.
La concejal de Unidad Ciudadana, Virginia Sívori, ironizó en las primeras horas de la tarde sobre las negociaciones. “Este tema se está tratando como una subasta pública”, dijo a Canal 10 con relación a los porcentajes de incremento que cada bancada iba arrojando.
No faltaron los chispazos públicos. El secretario de Economía y Hacienda, Hernán Mourelle, les pidió “responsabilidad” a los concejales. Dijo que hasta el momento no la había visto. Y mencionó que el municipio pierde “$ 60 millones por mes” mientras se demora la aplicación de un aumento de tasas. “Se podrían asfaltar 60 cuadras por mes”, deslizó en declaraciones a la FM 102.1.
Coria, en cambio, responsabilizó a Mourelle de ponerle palos al consenso. “Hay algunos funcionarios del Ejecutivo, sobre todo el secretario de Hacienda, que parece que está todo el tiempo intentando dinamitar la posibilidad de un tratamiento. Tengo dudas de si él quiere hacer un buen trabajo para el intendente o cuáles son sus objetivos realmente”, disparó en loquepasa.net.