Mar del Plata ofreció primavera, una retrospectiva del invierno y un anticipo del verano en apenas tres días. La variación climática durante el fin de semana largo permitió a los turistas que eligieron la ciudad improvisar partidos de fútbol en bermudas y ojotas sobre la arena, buscar reparo del viento en centros comerciales y espacios recreativos cerrados, y emprender mateadas y caminatas por la costa con una condición elemental para disfrutar de la Feliz: tener un abrigo siempre a mano.

La variedad de propuestas culturales (como la Feria del Libro, el Festival Iberoamericano de Teatro y las nuevas exposiciones en el Museo MAR) y los espectáculos preparados especialmente con motivo de esta fecha (el show de Andrés Calamaro, la función de Gabriel Rolón y el espectáculo de Radagast, entre otros), convivieron sin conflicto alguno con las alternativas tan tradicionales como naturales que ofrece Mar del Plata, donde la Rambla, la costanera, el centro, Güemes, Constitución y por supuesto las playas persistieron como paseos ineludibles para el turismo.

Mientras que el viernes la temperatura superó los 20 grados y animó a muchos a vivir un día de playa completo, incluso metiéndose al mar, el sábado nublado llevó a miles de turistas a elegir propuestas alternativas al aire libre: rondas de mate en distintos puntos de la costa, compras en los distintos paseos comerciales, mesas llenas en algunas cervecerías y una recorrida por la 15ª Feria del Libro Mar del Plata Puerto de Lectura, entre otras opciones.

Ayer, con una máxima que rozó apenas los 14 grados, las actividades al aire libre se trasladaron a lugares con reparo. Y para hoy, el pronóstico anticipa un pico de solo 12 grados, en el último día del fin de semana largo con motivo del 12 de octubre, antes de emprender un regreso a casa que anticipa cierta congestión en las rutas. El viernes se alcanzaron a registrar más de 2.000 vehículos por hora en dirección a la costa.

Qué hacer en Mar del Plata, restaurantes económicos, los horarios de la Feria del Libro, la programación en los cines y la disponibilidad de entradas a último momento para asistir al recital de Andrés Calamaro fueron ayer las búsquedas que mayor ímpetu se repitieron en Google a través de miles de teléfonos celulares desde la ciudad en la recta final del fin de semana.

Las tendencias, después del mediodía, reflejaron los paseos y actividades más elegidas por miles de personas en el marco de un domingo fresco, pero con la necesidad de aprovecharlo como sea.

Así, la Feria del Libro que se desarrolla en el Centro Cultural Estación Terminal Sur del Paseo Aldrey vivió entre el sábado y el domingo sus dos días con mayor concurrencia desde que abrió, según los propios libreros.

El show de Calamaro dentro de la gira “Cargar la suerte” llenó de gente anoche al estadio Polideportivo Islas Malvinas, que vibró al ritmo de lo nuevo -y por supuesto lo clásico- del popular artista.

Muchos otros cerraron su visita a Mar del Plata frente a la pantalla grande. Los locales gastronómicos del Paseo Aldrey se convirtieron en un concurrido refugio para el turismo y tras ello, los cines del centro comercial y cultural de Alberti y Sarmiento registraron un incremento en la cantidad de espectadores, factor que se replicó en otras salas de la ciudad, también llenas. “Joker”, con sus superlativas críticas, fue la más elegida por marplatenses y turistas.

La gastronomía trabajó “dentro de todo bien”, según comentaron integrantes de la Asociación Empresaria Hotelera y Gastronómica. Los hoteles, por su parte, registraron el 70% de sus plazas ocupadas por turistas. La demanda “fue pareja” tanto en los establecimientos de las categorías más altas como en las más bajas.

Las inmobiliarias también sintieron el movimiento turístico gracias a la búsqueda de departamentos, pero también con una creciente cantidad de consultas de precios para el verano.

En la aplicación Airbnb, que no para de ganar adeptos en el mundo, se registró un fuerte incremento de propiedades en alquiler para este fin de semana, con valores promedio de 30 dólares la noche y la disponibilidad de opciones más económicas, pero también más caras, de acuerdo a la calidad y ubicación del inmueble.