La Justicia de Garantías de menores dictó la prisión preventiva para el adolescente de 17 años que mató a un changarín que circulaba por la bicisenda de la ruta 88 para robarle la bicicleta.

De esta manera, el imputado por “homicidio agravado en ocasión de robo” continuará detenido, alojado en el Centro de Admisión y Derivación de Batán.

El hecho es investigado por la fiscal Mariana Baqueiro, quien, con el único imputado detenido, tendrá que recopilar las pruebas suficientes para solicitar la elevación a juicio.

El crimen de Miguel Ángel Rojas (45) ocurrió en la madrugada del 12 de enero, cuando la víctima iba en su bicicleta por la bicisenda de la Ruta 88, a la altura de la fábrica Mauro Sergio. En esas circunstancias fue interceptado por un menor de 17 años que intentó robarle el vehículo y para ello lo amenazó con un arma blanca. Rojas se habría negado, naturalmente, por lo cual el adolescente lo atacó.

El changarín recibió dos puñaladas y el menor aprovechó para tomar la bicicleta y escapar hacia su casa, ubicada a aproximadamente 10 cuadras de allí.

Poco después ingresó un llamado al 911 en el que se daba cuenta de la aparición de un cuerpo tirado sobre la bicisenda y al acudir un móvil policial se constató el fallecimiento de ese hombre.

Si bien no había testigos y el panorama parecía complejo de investigar, la propia madre del menor llamó a la policía y entregó a su hijo.

El adolescente aún tenía ropas manchadas con sangre y solo habría dicho que se había peleado por la bicicleta.