Miles de civiles se encuentran atrapados en Al Raqqa, en el noreste de Siria y considerada la “capital” del grupo yihadista Estado Islámico (EI) en ese país, expuestos al fuego de todas las partes durante la ofensiva militar para retomar la ciudad, denunció hoy la organización de derechos humanos Amnistía Internacional (AI).

La organización ha documentado cómo cientos de civiles han perdido la vida o han resultado heridos desde que comenzó el pasado 6 junio la ofensiva contra la provincia por parte de las Fuerzas de Siria Democrática (FSD), una milicia liderada por kurdos y apoyada por efectivos estadounidenses.

“Mientras la batalla para arrebatar Al Raqqa al Estado Islámico se intensifica, miles de civiles están atrapados en un laberinto mortal, expuestos al fuego de todas las partes”, aseguró Donatella Rovera, asesora de crisis de AI, que dirigió la investigación sobre el terreno.

“Puesto que saben que el Estado Islámico utiliza a civiles como escudos humanos, las Fuerzas de Siria Democrática y las fuerzas estadounidenses deben redoblar sus esfuerzos para proteger a la población civil, en particular, evitando los ataques desproporcionados o indiscriminados y creando rutas de escape”, dijo.

Asimismo, Rovera auguró que la batalla se volverá “más peligrosa” cuando llegue “a sus últimas fases en el centro de la ciudad”, informó la agencia de noticias EFE.

La ONG Observatorio Sirio de Derechos Humanos, con sede en Londres, afirmó esta semana que la cifra de muertes de civiles por bombardeos de la coalición internacional, liderada por Estados Unidos, en Al Raqqa aumentó a 167, entre ellos 59 menores y 37 mujeres, desde el pasado 14 de agosto.

AI desconoce el número de civiles que continúan atrapados dentro de Al Raqa, si bien la ONU calcula que la cifra puede oscilar entre 10.000 y 50.000.

Además, se cree que muchos de ellos, posiblemente la mayoría, están ocultos como “escudos humanos” en el casco antiguo de la urbe y otras zonas controladas por el EI.

Según otro recuento del Observatorio publicado ayer, al menos 2.050 personas, entre ellas 789 civiles, han muerto desde el inicio de la ofensiva de las FSD contra el EI.

Las FSD se ha hecho con el control del 60,1% del territorio de la ciudad, de acuerdo con del Observatorio.