Mar del Plata ha sido, estratégicamente, un actor clave para la adhesión a la Ley de Economía del Conocimiento que aprobó esta semana la Cámara de Diputados bonaerense. La presidenta del Concejo Deliberante, Marina Sánchez Herrero, quien trabajó para ese objetivo, destacó que ahora la tarea, desde el Estado, debe continuar con “más políticas públicas” para potenciar “en clave de inserción e inclusión social” a esta industria en franco crecimiento que cada vez genera más puestos de trabajo.

En una entrevista con LA CAPITAL, la titular del Cuerpo deliberativo celebró el “consenso” alcanzado -“no hay grieta en esta ley”, aseguró- y analizó el presente del sector, como así también la necesaria articulación público-privada para que el desarrollo de la tecnología y la innovación “se derrame en todos los sectores de la sociedad” marplatense.

-¿Cómo impactará en la ciudad la adhesión provincial a la Ley de Economía del Conocimiento?

-Es algo muy importante que el sector reclamaba. Mar del Plata creó el Distrito Tecnológico con claridad absoluta sobre qué políticas públicas hay que llevar adelante para el crecimiento de la ciudad. Y, por supuesto, la innovación y la tecnología son esenciales. Se necesitaba la adhesión a esta ley nacional, que es una buena ley en materia de Economía del Conocimiento. Por supuesto, todas las normativas son perfectibles y se pueden ir modificando, más aún en materia de tecnología e innovación, que tiene un gran dinamismo.

-¿Qué herramientas crea esta ley?

-Crea herramientas muy importantes en cuanto a la reducción de impuesto a las Ganancias, exención en derechos de exportación y estabilidad fiscal. Es una ley muy beneficiosa que tiene una mirada sólida de fomento de la industria y en cuestiones de política tributaria. Tiene una mirada de beneficios tributarios pero también de fomento, que es lo que más se busca al hablar del crecimiento del sector que transversalmente hace crecer a los demás. Se debe sumar a la mirada tributarista de una norma que contiene beneficios para radicarse e instalarse.

-Con el camino recorrido en la materia, ¿Qué aportó Mar del Plata para la sanción de esta ley?

-Mar del Plata buscó esta ley. Sus representantes trabajaron para que esto sucediera y el sector hizo lo propio. Tenemos el Distrito Tecnológico y beneficios municipales, pero era necesaria esta adhesión porque incluye al sector de la provincia en los beneficios nacionales en materia de exportación, estabilidad fiscal y aportes patronales.

-Las industrias exigen “reglas claras” para crecer. ¿Esta ley genera mayor certidumbre para el sector?

-En esta Argentina, el sector necesita estabilidad fiscal, seguridad jurídica y claridad respecto a las políticas públicas para que haya un crecimiento sostenido. A eso hay que sumarle una ciudad con condiciones amigables para que ese sector crezca. Pero básicamente pensarlo en base a la generación de empleo, que es un círculo virtuoso que entiende a la inclusión y al crecimiento social y, por otro lado, a lo que es generar la mano de obra.

-¿Qué impacto sociolaboral cree que tendrá?

-Si vemos cómo crece el sector y lo derramás en los demás, todo crece. Es un círculo que es propositivo para el crecimiento de Mar del Plata. Somos la capital del turismo, del surf, tenemos puerto, industria, construcción y hoy tenemos políticas en Economía del Conocimiento. Tenemos todo para crecer.

-¿El foco está puesto en el desarrollo de tecnología o en generar empleo? ¿Cómo se sigue de ahora en más?

-Mar del Plata es el quinto polo a nivel nacional. Tiene más de 120 empresas, 500 microemprendimientos y contrata más de 3.000 trabajadores. Esto sigue con políticas públicas que unan todo el avance de tecnología e innovación con el resto de los sectores en clave de inserción e inclusión social. El sector genera innovación, modernidad, progreso y crecimiento volcado a todos los actores de la ciudad: turismo, pesca, industria, construcción y todos los sectores en los que derrama transversalmente potenciándolos, dándoles valor agregado. El mundo demuestra que la tecnología y la innovación hacen virtuosos a todos los sectores en los que se incluye. Pero, como Estado, no debemos perder de vista que eso debe ser en clave de inserción e integración social y buscar cómo generar trabajo, inclusión social y carreras cortas con rápida salida laboral, garantizando que las personas puedan acceder.

Grupo Nucleo, en el Distrito Tecnológico de Mar del Plata.

-¿El carácter dinámico de la tecnología dificulta proyectar cuál será la realidad del sector en diez o quince años? ¿Cómo se articulan políticas para una industria en permanente cambio?

-La inversión en ciencia y educación es lo primero que hay que tener en claro para, aún no sabiendo dónde vas a estar en quince años, saber que es el camino. La tecnología es dinámica, rápida y de fuerte impacto y crecimiento. Nos sorprende a nosotros mismos cada seis meses. Es clave entender que cualquiera sea el camino hacia dónde vamos, por desconocido que sea, tiene que ser sobre la base de una inversión fuerte en educación y ciencia, y con una mirada social. Todas las políticas públicas deben ser pensadas para que la tecnología y la innovación estén puestas al servicio de la sociedad; si no, simplemente es crear un producto. Y lo que buscamos es una sociedad en crecimiento y con inclusión.

El desarrollo de la economía del conocimiento y la tecnología van unidos con la inclusión social, así lo demuestra el Polo Tecnológico de Mendoza que tuve la oportunidad de recorrer. Mar del Plata tiene un gran potencial para el crecimiento del distrito con identidad propia. pic.twitter.com/CFGuIdmHxZ

— Marina Sanchez Herrero (@MSanchezHerrero) May 9, 2022

-Hace poco visitó el Distrito 33 de Mendoza. ¿Qué observó y qué podría replicarse en la ciudad?

-Mendoza tiene una proyección a largo plazo que entendió que se potencia con tecnología e innovación. Generó proyectos para la radicación, el fomento y la creación de ese polo y lanzó inmediatas políticas públicas permanentes. Incentiva a que microempresas y pymes tomen estudiantes o personas con carreras cortas. Con el intendente Montenegro, hablamos de la proyección del Distrito Tecnológico y la tecnología. En Mar del Plata debemos tomar la experiencia de otros polos, pero entendiendo que debemos crear el propio, con nuestro trabajo y nuestra gente, ser profundamente realistas de cuál es la proyección hacia donde queremos ir, dándole fuerte impronta de ADN marplatense. Es central trabajar en clave de integración social con las universidades. No hay posibilidad de que estos deseos sucedan si no hay una profunda vinculación público-privada con confianza y claridad. La educación es esencial para que este crecimiento se concrete.

-¿Cuáles son las próximas políticas que el Ejecutivo y el Concejo articularán para alentar el desarrollo local de la Economía del Conocimiento?

-Bueno, se hizo bastante con la creación del polo y las ordenanzas. Ahora voy a presentar un proyecto para adherir a la ley provincial, ya que así lo requiere. Hay que avanzar estratégicamente en el diseño de la ciudad a largo, mediano y corto plazo, seguir avanzando en políticas públicas y continuar el camino en el que se está en materia del Distrito Tecnológico. Afortunadamente, salió la adhesión y esta es una ley de consenso.

-No hay grieta en este tema, ¿no?

-Por suerte, no. Hay una agenda que hay que poner por encima de cualquier mirada diferente y que la sociedad requiere, porque Mar del Plata está en un proceso de reactivación. Y, para eso, hay temas comunes en los que debemos lograr tener síntesis. Hoy la sociedad nos pide que escuchemos y encontremos acuerdos para que Mar del Plata salga adelante y esa es la agenda sobre la que tenemos que trabajar todos, oposición y oficialismo.