El fútbol marplatense está de luto por el fallecimiento de Daniel Cajal, de extensa trayectoria como futbolista y formador en la ciudad y que desde hacía más de una década residía en Córdoba, donde trabajaba como scouting en el club Talleres. 

En sus inicios como futbolista, Daniel Cajal integró las selecciónes Juveniles de Mar del Plata que se consagraron campeonas del Torneo Provincial de la Federación del Este, en 1984 y 1985. En el primer torneo fue compañero de Alejandro Giuntini, el defensor que después llegó a Boca, también fallecido ocho años atrás. Al año siguiente, logró el título junto a Germán Burgos, ex arquero de la Selección Argentina.

En la Liga Marplatense “el Cabezón”, mediocampista central, defendió los colores de Círculo Deportivo (fue subcampeón en 1986), Deportivo Camet, Banfield, San Lorenzo (se consagró campeón en 1995 y jugó el Argentino B 95/96) Nación y Libertad, entre otros.

Después se dedicó a la dirección técnica, donde se destacó como ayudante de campo de Luis Piazzalonga en Aldosivi en el Torneo Argentino A e incluso fue entrenador interino en un partido contra General Paz Juniors.

Como formador, Cajal trabajó aquí en Independiente, Atlético Mar del Plata, River, General Mitre y Aldosivi.

En su paso como coordinador el club portuense llegaron, entre otros, Joel Carli, Facundo Oreja, Nahuel Roselli y Laureano Tello, mientras que estando en Independiente recomendó a Santiago Rosales, quien luego se convertiría en la venta más importante en la historia de Aldosivi, cuando pasó a Racing en poco más de 3 millones de dólares.

También fue coordinador general en Las Palmas de Córdoba y hacía diez años que oficiaba de scouting de Talleres, club de la máxima categoría del fútbol argentino. Siempre volvía a Mar del Plata para observar jugadores de las divisiones inferiores.

Desde hacía unos días Cajal luchaba por su vida tras sufrir un ACV y este domingo se confirmó su deceso a los 57 años.