Clima electoral, crisis, miedo a un posible corralito, una discusión matrimonial y una mujer con una valija cerrada con más de medio millón de dólares que deambuló por las calles de Mar del Plata durante más de tres días hasta terminar en una habitación del Hospital Interzonal. Con una premisa similar Tarantino hace una obra maestra.

En la mañana de este jueves, el esposo de la mujer que llevaba 600.000 dólares encima, y su abogado, Lautaro Resúa, se presentaron en la Fiscalía N° 1, a cargo de Fernando Castro, para justificar el origen del dinero y reclamar su devolución, ya que el fiscal, por precaución, lo secuestró y lo depositó en el Banco Provincia.

El hombre, de 69 años, identificado como H.V., le explicó al fiscal Castro que está casado con la mujer hace más de 30 años, y que nunca se separaron. Según explicó en su declaración, es comerciante, vivían en Capital Federal y, tras retirarse, habían decidido vender unas propiedades para radicarse en Mar del Plata.

Esas ventas de propiedades serían la justificación de los casi 600.000 dólares que la mujer llevaba en una valija.

Según detalló H.V. al dinero de las ventas de las propiedades lo bancarizaron, y abrieron unos plazos fijo y una caja de ahorro. Sin embargo, ante los resultados electorales de las PASO y por miedo a un nuevo corralito -que ya habría afectado al matrimonio tras la crisis del 2001- decidieron retirar del banco todos sus ahorros y guardarlos en el departamento en el que viven, en la zona de Playa Grande.

Encerrado en un cuarto, medio millón en fuga

Según el relato de H.V., él y su pareja discutieron el sábado a la tarde -la mujer luego lo denunciaría por violencia de género-. Tras la discusión, la mujer lo “encerró” bajo llave en el dormitorio y guardó todo el dinero que había en el departamento: 587.000 dólares y 380.000 pesos.

H.V contó que si bien se preocupó por el paradero de su esposa, la mujer entró y salió del departamento en varias oportunidades y, luego, fue hasta un hotel cercano al edificio, donde alquiló un cuarto.

El hombre dijo que se tranquilizó, que pensó que la mujer pasaría la noche allí y luego volvería. Sin embargo, el domingo a la mañana, al no aparecer, fue hasta el hotel a preguntar por ella y le dijeron que si bien había solicitado un cuarto solo consumió un té y se marchó.

H.V. llamó a un matrimonio amigo para que lo ayudaran a buscar a su esposa. Sin embargo, a pesar de llamarla y buscarla no pudieron hallarla.

El hombre ya era consciente que su esposa se había ido y que se había llevado en una valija toda la fortuna de la pareja, sin embargo no quería dar ese datalle a sus amigos ni a la policía, por miedo.

Denuncia por violencia de género y brote psicótico

Las cámaras de seguridad del edificio y del hotel registraron los movimientos de la mujer durante el sábado, hasta que se subió a un taxi. Qué hizo el domingo es algo que aún es un misterio.

El lunes, la mujer, que llevaba su valija para todas partes, fue hasta la Comisaría de la Mujer y denunció a H.V., supuestamente por haberla golpeado durante una discusión. Ante esta situación, el personal del lugar empleó los protocolos de rigor, tomó la denuncia y derivó a la mujer al Hogar Galé, un centro de tránsito para víctimas de violencia de género.

Una vez en el Hogar Galé la mujer se “descompensó” y tuvo un “brote psicótico”, por lo que la trasladaron al Hospital Interzonal, a donde llegó, claro, junto a su inseparable valija.

En el HIGA, el personal psiquiátrico ingresó a la mujer y se comunicó con su esposo, quien fue hasta el nosocomio acompañado por el matrimonio amigo.

En el hospital, al haber sido denunciado por violento, H.V. tuvo prohibido acercarse a su esposa, por lo que solo pudieron acceder a verla sus amigos, quien corroboraron que estaba internada, sedada, pero en buen estado de salud. Según trascendió, la mujer, al ver sus amigos, les habría balbuceado: “Llévense la valija que tengo millones”. Pero no le prestaron atención.

En algún momento, como control, el personal médico del hospital vio el interior de la valija de la paciente y al abrirla encontraron que tenía fajos de billetes de dólares y de pesos, por lo que llamaron a la policía, a dos testigos e hicieron un rápido arqueo.

El hallazgo fue denunciado al fiscal Castro, quien secuestró el dinero y lo resguardó.

La mujer internada, el dinero resguardado

La mujer, de 66 años, se encuentra internada en un psiquiátrico privado y aún no pudo declarar ni dar su versión de los hechos. El fiscal Castro espera que se encuentre mejor de salud y en sus cabales para poder hablar con ella.

Según trascendió, la mujer no contaría con antecedentes de trastornos psiquiátricos y en la pareja tampoco hay hechos denunciados de violencia de género, salvo un episodio. Fuentes consultadas por LA CAPITAL confirmaron que en el pasado la mujer se “descompensó” mientras iba con su marido en auto, bajó la ventanilla y gritó que estaba “siendo secuestrado”. Personal policial frenó el vehículo, la situación se aclaró y dejó constancia de lo sucedido, sin que pasara a mayores.

El abogado del hombre, Lautaro Resúa, explicó a LA CAPITAL que esperan que en las próximas semanas el “asunto” se pueda destrabar y el matrimonio recupere su dinero, ya que, según aseguró, pudieron demostrar su origen.

Finalmente, Resúa “destacó” la “honestidad” de los trabajadores del Higa, de la policía y de la Fiscalía N° 1, que ante un hecho prácticamente sin precedentes, actuaron “de manera ejemplar”.