Dios Salve a la Reina, “El mejor tributo de todos los tiempos” a la magistral banda Queen, se presentará este viernes en Mar del Plata.  En medio de su gira internacional, la formación llega con su nuevo espectáculo “Don’t stop me now” a la sala Roxy del Centro de Arte MDQ. Se trata de una recorrida sin respiro por los momentos más importantes de la carrera del mítico grupo británico.

La banda viene de presentarse en el festival español “Rock Fest Barcelona”, compartiendo escenario junto a Aerosmith y se prepara para su primer show en Japón y para despedir el año con un espectacular show en el mítico Teatro Gran Rex de Capital Federal, el 15 de diciembre próximo.

Pablo Padin, de impactante parecido físico con Freddie Mercury, es el “frontman” de la banda que integran el talentoso Francisco Calgaro en guitarra, Ezequiel Tibaldo en bajo y Matías Albornoz en batería.

Desde México, uno de los puntos de la gira internacional antes de Mar del Plata, Padin habló con LA CAPITAL y contó cómo será el show cómo vive el trabajo de ponerse, cada noche, en la piel del mítico Freddie Mercury.

– ¿Cómo marcha la gira internacional que incluye Festivales multitudinarios y compartir escenario con bandas muy importantes?

– Ya estamos en mitad de esa gira, con el enorme placer de haber compartido escenario con gigantes de la música como Aerosmith, y todavía con algunos desafíos, como nuestro primer show en Japón. La verdad que disfrutamos cada día en esta banda y cada experiencia nueva.

– ¿Qué particularidades tiene el espectáculo “Don’t Stop me now” con respecto a los shows anteriores?

– Para este show elegimos un refrito de los mejores temas de Queen en vivo, algunos que no tocábamos hace bastante y además elegimos algunas perlitas de la primera época. Es un show muy dinámico con un poco de todo, mucho rock, muchas baladas y mucho de la esencia de Queen.

– ¿Por qué cree que la música es tan vigente, aún a más de 20 años de la muerte de Freddie Mercury?

– La verdad que la receta no la sabemos, pero si vivimos día a día que Queen sigue absolutamente vigente. A nuestros shows van chicos, adolescentes y ese fenómeno se repite en todo el mundo.

– ¿Recuerda qué es lo primero que escuchó de Queen? ¿Cuándo comenzó a admirar a la banda?

– Los empecé a escuchar de adolescente, un par de años antes de la muerte de Freddie. Descubrir la obra de Queen en plena formación musical fue un pilar en mi crecimiento como músico. A través de los años no paro de descubrir y redescubrir matices, elementos y nuevas armonías en los temas, que de tan complejos no dejan de sorprenderme.

– ¿Cómo fue el proceso de trabajo y estudio para convertirse en banda tributo?

– Fue algo totalmente natural. Será que nunca quisimos serlo. Nos juntamos a tocar temas de Queen porque era la banda que nos gustaba a todos y el camino nos fue llevando a presentarnos en lugares cada vez mas grandes, y en buscar cada día mas parecernos al show original. Nunca lo pensamos. Simplemente sucedió.

– ¿Qué es lo que más le cuesta de ponerse en la piel de Mercury?

– La exigencia vocal es siempre un desafío. Freddie Mercury era único y el recuerdo de la gente es el de sus mejores recitales. Subirse al escenario a representar lo mejor de él todas las noches y estar a la altura es un desafío constante que llevamos con extremo respeto.