“Diez por ciento una buena idea, noventa restante de trabajo”
Madeleine Roux, autora de la famosa saga "Asylum", se declaró admiradora de la escritora argentina Silvina Ocampo y habló de sus experiencias extrasensoriales.
La escritora estadounidense Madeleine Roux llegó a la Argentina para presentar en la Feria del Libro su saga “Asylum” y su nuevo trabajo, “La mansión de las furias”. Mantuvo una entrevista con alumnos de un colegio de Buenos Aires y habló sobre su nuevo trabajo: escribir para el cineasta George Lucas.
Su última producción, publicada por el sello V&R, “va a gustarle a los fanáticos de Jean Austen, aunque será más excitante porque tiene monstruos”, vaticinó Roux en diálogo con Télam, sobre la novela ambientada en 1810, que trata sobre una joven que escapa de un internado donde la maltratan y es rescatada por una anciana enigmática.
Con sus uniformes azul y verde, un centenar de alumnos de entre 14 y 17 años armados con hojas y cuadernos llenos de anotaciones sobre la vida y trabajo de Roux, se instalaron en el salón de actos y escucharon a la escritora que iba develando poco a poco los secretos de los relatos que tanto los apasiona.
Luego llegó el momento de las preguntas y poco a poco fueron levantando las manos y preguntando a su turno lo preparado junto a sus profesores para la autora de brazos tatuados, collar dorado y cabeza medio rapada.
Las preguntas abarcaron desde la edad en que comenzó a escribir (18); pasando por cuál es su libro favorito (“La trilogía ‘El Señor de los Anillos’, todos los de Stephen King y los de Angela Carter”) o de qué se recibió (licenciada en escritura creativa y teatro); hasta si tuvo el famoso bloqueo de autor.
“Lo del bloqueo es algo que uno dice para excusarse por no escribir, un trabajo que requiere práctica e investigación pero que cuando más lo practicás mejor te sale. No me puedo permitir tener ningún bloqueo porque si no, me quedaría sin casa. El secreto para que una historia se convierta en éxito es: 10 por ciento una buena idea y el 90 restante trabajo”, reflexionó Roux.
Las manos se iban levantando tímidamente y las preguntas progresaban:
– ¿Cuál es tu posición política?
– Soy liberal progresista pero lo más evidente es que en mis libros apoyo sobre todo a la comunidad LGTB, de lesbianas, gays, bisexual y transexual.
– ¿Vas a llevar tu saga a la pantalla grande?
– Lo pensé pero me faltan los recursos, todo depende de los estudios cinematográficos.
Hace poco días, en una entrevista, Roux declaró que se sentía atraída por la escritora argentina Silvina Ocampo y los chicos no dejaron pasar ese detalle por alto: ¿De qué manera te sentís relacionada con ella? “No soy tan buena, lo de ella es alta literatura y lo mío es pasatista. Algún día me gustaría tener la experiencia de vida suficiente como para escribir así… sería genial”.
Finalizada la actividad hubo sorteos y firma de libros por parte de la autora nacida en Minnesota en 1985, hoy bestseller que poco después de graduarse con honores abrió un blog donde escribió “Allison Hewitt is trapped”, serie de ficción experimental que se extendió rápidamente por la blogósfera.
Georgina Ditros, del sello V&R, comentó que este tipo de encuentros “beneficia a todas las partes, porque los chicos pueden practicar una lengua que no les es propia y mantener contacto, sin intermediarios, con autores que han leído mucho. Además de que es una forma más de difundir la lectura”.
En tanto que Roux repasó su meteórica trayectoria dentro del segmento young-adult, desde las experiencias que la llevaron a desarrollar el género con que concibió la exitosa septualogía “Asylum”, hasta su último trabajo.
– ¿Recordás la primera historia que publicaste, cuál fue?
– “Allison Hewitt is trapped”, era un libro de zombies que tiene aventura y humor. Comenzó en formato de blog y la leyeron cinco mil personas y con algunos interactuábamos mucho. Tiempo después mi agente la vio y decidió publicarla pero sin perder la esencia del formato blog, así que tuve que pedirle permiso a mis lectores para convertirlos en personajes de aquella historia. La obra se vendió bien pero nada comparado con el éxito de ‘Asylum’. Esa saga -compuesta por siete entregas: “Scarlets”, “Sanctum”, “Los artistas de huesos”, “Catacomb”, “El director” y “Escape del asylum”- trata sobre un grupo de adolescentes sobresalientes que van a tomar un curso de verano, previo al ingreso a la universidad, a New Hampshire, pero terminan en un viejo hospital psiquiátrico que esconde los más tenebrosos recuerdos de sus antiguos pacientes.
– La saga gira en torno a una serie de eventos sobrenaturales, ¿cómo surgió tu conexión con ese tipo de registro?
– Me crié en una casa victoriana de campo donde pasaban cosas extrañas: las luces se encendían y apagaban solas, sonaban ruidos extraños. Mi madre aún vive ahí y sigue teniendo experiencias raras, experimentó más cosas extrañas que yo, que quizás por ser pequeña cuando ocurrían no les di demasiada importancia. Extrañamente, eso no fue lo que me impulsó a escribir sobre el género. En aquel momento me interesaba mucho en los libros históricos.
– ¿Tuviste algún tipo de experiencia extrasensorial mientras escribías “Asylum”?
– Sí, durante la investigación que realicé para escribir la saga tuve una serie de pesadillas que algunas noches no me dejaban dormir. Lo aduje al haber visto muchos videos y fotografías que terminaron afectando mi imaginación.
– ¿Te ves escribiendo otros géneros?
– Claro que sí. Me gusta explorar en todos los géneros, de hecho en estos momentos estoy escribiendo y negociando la publicación de un libro de ciencia ficción. También tengo un libro de fantasy que necesita mucho trabajo y una historia casi lista destinada al equipo del director y productor de cine George Lucas, que va a realizar una antología de Star Wars por los 40 años de la saga.
– ¿Qué conocés de los lectores fanáticos de Argentina?
– Sé que hubo mucho movimiento en la redes y eso hizo que desde otros países me pregunten cuándo los voy a visitar. Los veo muy apasionados y demostrativos, algo a lo que no estamos acostumbrados los autores en Estado Unidos. Tuve un pequeño encuentro con booktubers, youtubers e instagrammers y fue hermoso conocerlos cara a cara.