El 21 de noviembre se celebra el Día Nacional de la Enfermería en conmemoración al nacimiento de la Federación de Asociaciones de Profesionales Católicas de Enfermería, y como un homenaje a los profesionales de la salud que trabajan a diario en pos de la recuperación y la rehabilitación de pacientes, la asistencia sanitaria y la prevención de enfermedades.

En este contexto de celebración y reflexión, el Licenciado en Enfermería perteneciente al equipo de Dar Salud, Jorge Hoffmann (M.N. 47473 Y M.P. 389), expresó: “Nuestra profesión ha pasado por distintos momentos, desde la formación netamente técnica basándose en el empirismo, en la práctica, la experiencia y la observación de los hechos hasta llegar a nuestros días, a la formación de una disciplina sostenida por un conocimiento epistemológico y científico en donde la intelectualidad, el espíritu crítico y el sentido ético forman al profesional. Esto abrió nuevas perspectivas, como sujetos transformadores del sistema de salud y como profesionales acordes al proceso histórico social actual”.

“Durante la pandemia de COVID-19, la comunidad toda ha visualizado la labor esencial que realizamos las enfermeras/os. Como resultado, la enfermería nunca ha sido más valorada ante los ojos de la opinión pública, lo cual ha provocado también un repunte del interés en la carrera de enfermería”, sostuvo.

Un relevamiento de la Organización Mundial de la Salud destacó que el personal de enfermería configura más de la mitad del personal de salud que hay en el mundo. Según la OMS, la pandemia de COVID-19 es clave para recordar “el papel insustituible que desempeñan y una llamada de atención para asegurar que reciben el apoyo que necesitan para salvaguardar la salud”.

En la actualidad, queda fuera de discusión la loable labor que, tanto enfermeras como enfermeros, llevan adelante. “Sin la ciencia de la enfermería no puede existir la práctica profesional”, afirmaron desde la Sociedad Argentina de Pediatría, y es que su rol resulta indispensable para el desarrollo de cualquier tratamiento, desde el más mínimo al más complejo.

El licenciado Hoffmann explicó que, desde Dar Salud Internación Domiciliaria, se trabaja en “forma multi e interdisciplinaria, abordando de manera integral las distintas patologías. Dentro de sus programas como es el de adultos mayores, cuidados paliativos, nutrición enteral y el programa de pediatría, los profesionales abordan al paciente y su entorno familiar, desde el aspecto sanitario, social y psicológico.”

En este marco, el profesional de Dar Salud destacó que en su lugar de trabajo “se prioriza el trato humanizado y apuntado a una recuperación del paciente con una atención personalizada y en forma conjunta con el acompañamiento de la familia”.

Finalmente, se enorgulleció al afirmar que “cada vez que brindo un cuidado me siento mejor persona”.