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Deportes 15 de mayo de 2017

Después del duro golpe, Guillermo “pasará la escoba” en Boca

El entrenador de Boca dispondrá varias modificaciones para intentar cambiar el rumbo tras la derrota en el superclásico y mostrar una rápida reacción frente a Newell's.

BUENOS AIRES.- Boca Juniors, el líder del torneo de fútbol de Primera División, encara una semana clave en su afán de ganar el título, tras la dura derrota en el superclásico ante River Plate por 3-1, de local, y entrenador Guillermo Barros Schelotto realizará varios cambios para el partido frente a Newell’s Old Boys de Rosario, por la 25ta. fecha.

Si bien el equipo de La Ribera es el único puntero del certamen con 49 puntos, el silencio de los jugadores y la preocupación del técnico son dos claros síntomas de que “la casa no está en orden”.

Es que la derrota -inobjetable con River- desnudó la fragilidad defensiva, la falta de equilibrio en la mitad de la cancha y la carencia de un líder futbolístico desde la partida de Carlos Tevez al fútbol chino, algo que ya muchos dirigentes, sin el peso del presidente Daniel Angelici -hoy en el exterior por el congreso de la FIFA-, comenzaron a verbalizar.

Las críticas, aún suaves, están dirigidas principalmente hacia el entrenador, a quien le cuestionan su necedad para ver las falencias de su equipo.

Guillermo, tras la derrota de ayer, señaló: “Analizaré el partido, veré los errores y uno esta siempre esta abierto al cambio si es para que el equipo mejore”.

Una frase con cero nivel de autocrítica, algo que también muestran muchos de los jugadores en los que se apoya.
“Para algo uno está en este cargo, para tomar decisiones”, puntualizó dejando aún más en claro que realizará variantes para recibir a Newell’s, uno de sus perseguidores, a cuatro puntos.

Las primeras dos modificaciones serán obligadas: en el mediocampo el colombiano Wilmar Barrios ingresará por el uruguayo Rodrigo Bentancur, quien hoy viajó a Corea del Sur para jugar el Mundial Sub 20, y en el ataque Junior Benítez, Gonzalo Maroni o Fernando Zuqui reemplazará al lesionado Ricardo Centurión.

El colombiano Barrios, el volante con más marca, criterio y de mejor rendimiento cada vez que le toca jugar, es una fija; pero el sustituto de Centurión no está definido.

Junior Benítez, el reemplazante natural de Centurión, no está en su plenitud física ni futbolística; Maroni, una revelación, brilló ante Arsenal de Sarandi (debut con gol incluido) pero después no tuvo lugar en el equipo contra Estudiantes de La Plata y ni siquiera integró el banco frente a River; y Zuqui, el que menos chances tiene, prácticamente no jugó en lo que va del semestre.

Las otras dos variantes -en un principio especulaciones- serán por bajo rendimiento: en la defensa: el lateral derecho Gino Peruzzi, responsable de varios goles en contra en el torneo (no solo ayer sino también ante Talleres de Córdoba y Patronato de Paraná), le dejaría su puesto a Leonardo Jara; y Santiago Vergini sería reemplazado por Fernando Tobio.

Los jugadores, por su parte, optaron por el silencio y en el vestuario, post derrota, se juramentaron ganar los seis partidos que quedan por delante para quedarse con el campeonato.

Boca, en el sprint final del torneo, jugará contra Newell’s (L); Huracán (V), Independiente (L); Aldosvi de Mar del Plata (V); Olimpo de Bahía Blanca (V); y Unión de Santa Fe (L).

La semana de trabajo comenzará mañana a las 9.30 en Casa Amarilla (todavía no se sabe si a puertas abiertas o cerradas), pero en la cabeza del DT empezó hoy.

Guillermo se dio cuenta de que cometió errores: “Puede que me haya equivocado hoy, pero no en las 23 fechas anteriores”, admitió ayer en la conferencia de prensa.

El DT ahora debe demostrar que puede reencauzar un barco que parece a la deriva desde lo futbolístico y a la vez desde lo anímico. En síntesis hacer su trabajo, algo que por estas horas es cuestionado no solo por los simpatizantes sino también por algunos dirigentes.