A más de 140 días del comienzo del aislamiento social, preventivo y obligatorio, aún hay sectores que no han podido reactivarse. Tal es el caso de las salas de escape que se encuentran en Mar del Plata, que pese a haber diseñado un protocolo, no obtuvieron la autorización y ahora elevaron un “desesperado” pedido a la Municipalidad.

Desde hace pocos años, las salas de escape se instalaron en la ciudad, cautivando a jóvenes y adultos con innovadoras propuestas de entretenimiento. El rubro no tiene categoría y los locales figuran como “salones de eventos”, aunque advierten que “la realidad sanitaria es completamente diferente”.

La pademia encontró a varios de sus emprendedores en un proceso de “expansión”, que en algunos casos implicó grandes inversiones, pero las actividades quedaron suspendidas debido a la pandemia, lo que generó un fuerte impacto económico que se torna más grave mes a mes.

“Al día de hoy debemos alrededor de $600.000 entre alquileres, expensas y gastos. Mucho hemos puesto durante la cuarentena pero ya no tenemos más porque nos agarró la pandemia expandiéndonos y eso nos llevó mucha inversión”, expresó el responsable de una de las salas.

Hoy en día los propietarios que les alquilan los locales “no pueden seguir apoyándonos” ya que lo hicieron durante muchos meses. “No es falta de voluntad, sino que también necesitan ese ingreso”, destacó Emilio Espósito, responsable de una de las salas en la ciudad, quien pidió que el sector pueda reabrir cuanto antes y contó que una “ya presentó quiebra”.

“Hace 2 años apostamos a esta ciudad y no queremos que la pandemia acabe con nuestros sueños. En caso de cerrar las puertas 25 personas aproximadamente van a quedar sin trabajo, entre ellos se encuentran muchos gremios que son los constructores de las salas y de su mantenimiento, y aquellos que trabajan a diario en nuestros dos locales”, dijo Espósito.

Hace 4 meses que presentaron el protocolo y el mismo “fue visto con agrado” por la Secretaría de Producción municipal, pero desde ese día no han tenido respuestas positivas. El contacto con otros funcionarios, afirman fue con el mismo resultado.

En Capital Federal el protocolo fue presentado y aprobado para volver a la actividad en fase 3, por eso “no se entiende que estando en fase 4 aún no los habilitan”, señaló.

“Tenemos un local de más de 700 metros cuadrados y no nos dejan meter 4 personas de un mismo núcleo familiar, cuando locales de 200 metros cuadrados meten 50 personas o más de diferentes familias. Es algo totalmente irracional e injusto”, analizó el dueño de una de las salas.

“Creemos que cuando tratan nuestro caso nos involucran con los salones de eventos, porque así estamos habilitados ya que nuestro rubro no tiene categoría en la ciudad, pero la realidad sanitaria es completamente diferente, de hecho queda demostrado en el protocolo. No queremos terminar como tantos de nuestra generación que se van a Europa a trabajar”, dijo Emiliano Espósito

Por último, manifestó: “Estamos esperando una respuesta, fuimos siempre respetuosos y nos mostramos a entera disposición pero parece que eso no alcanza”.