por Sebastián Arana

 
Peñarol se dio un gusto grande. Jugó bien, tuvo otro respaldo en las tribunas -presentarse el domingo, temprano, y sin contra de fútbol por la tele tiene sus beneficios- y se encontró con una oposición más pobre de lo previsto. Así se impuso 82-63 a Boca para superar en la tabla a Bahía Basket y seguirse alejando del fondo.

El equipo “milrayitas” tuvo un primer cuarto casi ideal. A su poder de fuego, renovado por la incorporación al equipo del estadounidense Charles Hinckle, le agregó una buena defensa. Y al “combo” se añadió el pésimo porcentaje de los visitantes en lanzamientos exteriores (2/13 triples en toda la primera parte) para hacer el negocio más redondo todavía.

En consecuencia, en los primeros diez minutos el equipo local controló a un Boca inofensivo. Y le sacó una diferencia superior a los diez puntos apoyado en el tiro abierto de Hinckle y en un Austin tan certero cuando lanzó desde lejos como cuando decidió postearse y tomar tiros cortos.

Después de un 24-12 concluyente en el cuarto de apertura, Peñarol tomó una máxima de quince puntos con un triple de Gorosterrazu en la primera jugada del segundo parcial. En ese punto su impulso se detuvo. Con mayoría de relevos en cancha, se “secó” su ataque. Boca aprovechó y se puso en juego con un parcial 10-0. Sacando sus primeros contraataques, vía Jasiel Rivero, y con los dos únicos tiros de tres puntos exitosos de Flor en toda la etapa.

La caída local la detuvo el regreso al partido de Hinckle, tan acertado como en el primer cuarto. Un parcial de 6-0 para cerrar el cuarto, al influjo del zurdo estadounidense, trajo un poco de tranquilidad y una buena diferencia (39-28) a la hora de ir al descanso.
Boca metió un poco más de presión en la mitad inicial del tercer cuarto. Siguió sin anotar de tres puntos, con seis intentos infructuosos. Pero lo tuvo a Rivero en un nivel altísimo, imparable corriendo a cancha abierta. Así los dirigidos por Guillermo Narvarte achicaron a cuatro puntos (44-48) promediando el parcial.

La tercera falta personal del cubano, sin embargo, frenó el envión de Boca. Y Peñarol, con los relevos en cancha, pero moviendo la pelota con paciencia y sin egoísmos, jugó su mejor rato de bàsquetbol del partido. Valinotti condujo en buen nivel y Arn y Alloatti se acoplaron con oficio e inteligencia. La ventaja se estiró a 60-46 sobre el final del cuarto.

Gutiérrez encaró el tramo final con el quinteto que tan buenos resultados le había dado en los ùltimos minutos: Valinotti, Monacchi, Arn, Lauría y Alloatti. Y acertó un pleno. Fue Monacchi el que le terminó de complicar la noche a Boca con dos triples consecutivos. La luz trepó a veinte puntos (66-46) y ya no hubo retorno para los visitantes, impotentes para remontar una cuesta tan empinada en una noche demasiado errática con el aro. Pese a que aún faltaba todo un cuarto. Anoche fue demasiado Peñarol para tan poco Boca.

La síntesis

Peñarol 82
J. I. Marcos 0, C. Hinckle 14, J. P. Vaulet 13, K. Austin 17 y D. Tintorelli 7 (x) (FI); J. Valinotti 3, A. Alloatti 6 (x), L. Arn 7, L. Gorosterrazu 3, N. Laurìa 1, N. Franco 0 y T. Monacchi 11. DT: Leonardo Gutiérrez.
Boca 63
A. Konsztadt 2, E. Flor 13, A. Boccia 7, J. Rivero 21 y R. Johnson 2 (FI); M. Sandes 2, L. Gargallo 5, W. Graterol 4, B. Sansimoni 7, T. Cavallero 0, A. Barreiro 0 y A. Facello 0. DT: Guillermo Narvarte.

Estadio: Polideportivo “Islas Malvinas”.
Árbitros: Juan Fernández-Rodrigo Castillo-Gonzalo Delsart.
Parciales: 24-12, 39-28 y 60-46.