Danny Boyle le pone su sello a “Trust”
La serie dramática sobre el secuestro del nieto del magnate del petróleo John Paul Getty llega a la pantalla de la señal Fox Premium Series.
El primer billonario de la historia, las excentricidades y miserias de una familia cegada por el dinero y el secuestro de un nieto cuyo rescate nadie quería pagar son algunas de las claves que atraviesan “Trust”, serie dirigida por el reconocido cineasta Danny Boyle sobre el secuestro en 1973 del nieto del magnate del petróleo John Paul Getty, que estrenará Fox Premium Series el lunes próximo a las 23.
Donald Sutherland interpreta al peculiar millonario que pasó a la historia como un avaro cuando rechazó pagar lo que demandaban los captores de su nieto, aun cuando para sus cuentas personales la cifra no era más que un vuelto, y por regatear durante seis meses hasta pagar menos de la tercera parte del monto original.
Junto a él se destaca la doble ganadora del Oscar Hillary Swank, un resurgido Brendan Fraser y Michael Esper, entre otros.
“Trust” fue escrita y producida por Simon Beaufoy, colaborador de Danny Boyle en galardonados proyectos como “Slumdog Millionaire – ¿Quién quiere ser millonario?” (2008) -por el que ganó el Oscar a mejor guión- y “127 horas” (2010).
Los tres primeros episodios de la serie llevan el sello del director inglés y marcan la pauta para los siete restantes con los que se completa la temporada, en los que la colocación de la cámara y el uso de la música rock dotan de ritmo e intimidad a la trama; al tiempo que la intensidad de los colores, las secuencias surrealistas y la voz en off o el quiebre de la cuarta pared reflexionan sobre el difuso límite entre lo real y lo fantástico.
Es ese registro de cosas demasiado bizarras para ser verdaderas lo que atrajo a Beaufoy a crear “Trust”, como la figura del que en ese entonces era el hombre más rico del mundo, impasible ante los pedidos de ayuda de la madre de su nieto John Paul Getty III, mientras vivía encerrado en su opulenta mansión en el campo inglés, rodeado de cinco amantes y con un león como mascota.
Sobre los Getty y su obsesión con el dinero, las diferencias entre la serie y la película de Ridley Scott “Todo el dinero del mundo” (que retrata el mismo episodio y también estrenó recientemente) y la vigencia de la historia más de 40 años después, el creador de la serie, Simon Beaufoy dialogó con Télam.
– ¿Qué tan fiel es la serie con la historia real?
– El esqueleto de la historia es el mismo. Medio como que inventé las partes menos interesantes, pero las partes más increíbles de esta historia son verdaderas. El hecho de que la familia más rica del mundo no quisiera pagar un miserable rescate por su nieto; de que haya empezado como un autosecuestro, de que hayan tenido que cortarle la oreja, ponerla en la correspondencia y que justo hubiera una huelga postal y su oreja se quedara ahí en la oficina de correo sin ser enviada por dos semanas. El hecho de que John Paul Getty tuviera un harén de mujeres, que viviera con un león y un teléfono con cospeles en su casa, todas estas cosas extraordinarias son verdad.
– ¿Qué te atrajo de la historia?
– Lo que es realmente interesante, y una de las cosas que me fascinan acerca de contar esta historia ahora, es que de alguna manera el caso fue la primera pieza de reality TV. Fue la primera vez que periodistas persiguieron a alguien en público. Gail Getty era seguida todo el tiempo por periodistas mientras intentaba negociar la liberación de su hijo. Mucho de eso fue bien documentado por la prensa, que era una manera nueva de hacer periodismo en 1973. Ese fue el primer secuestro de alto perfil en la historia seguido públicamente.
– ¿Cuál es el mayor desafío al llevar historias reales a la ficción?
– Tenés que caminar en la cuerda floja cuando estás escribiendo sobre hechos reales o sobre personas reales, especialmente, si aún viven. Tenés la responsabilidad de hacer lo correcto con ellos y escribir su personaje con integridad. Obviamente, cuando estás transformando una historia real en un drama, tenés que cambiar algunas cosas, pero de alguna manera tenés que mantener la verdad emocional alrededor de los personajes.
– ¿Te preocupa que a la familia Getty le disguste?
– Hay sólo un personaje principal de esta historia que aún está vivo, que es Gail Getty, la única persona que realmente luchó incesantemente para liberar a su hijo cuando todos los demás estaban centrados en sí mismos y encerrados en su propio dolor. Tanto que no podían pagar el rescate por el chico. Espero haberle hecho justicia, tengo un inmenso respeto por cómo lidió con una situación inimaginablemente angustiante.
– ¿Por qué creés que es importante contar esta historia en 2018?
– Es una historia acerca de dos de las cosas más importantes en la vida, que son el amor y el dinero. Siento que nos obsesionamos con uno o el otro. Es un relato brillante para la actualidad, cuando la diferencia entre los muy adinerados y los muy pobres es tan extrema. Es un examen tanto del amor como del dinero y hace la pregunta acerca de cuál es más importante en tu vida. Los secuestradores querían un rescate de 17 millones, que John Paul Getty I negoció hasta bajarlo a 5 millones; vio a su nieto como una negociación.
– ¿Qué es lo que sorprenderá más al público de la serie?
– Lo más sorprendente es cómo va cambiando el tono; cada episodio es ligeramente diferente a los demás. El primero es como “Downton Abbey” con LSD. El segundo es como un relato extraño de misterio, un episodio de tipo de investigación procesal. El tercero es un flashback desde adentro del baúl del auto del joven Paul mientras es secuestrado. Hay un episodio que es enteramente hablado en italiano, todo desde el punto de vista de los secuestradores y sobre cómo carajo lidiaban teniendo a alguien en su comunidad por cerca de seis meses porque la familia no quería pagar el rescate. Lo sorprendente, entonces, es que cambia todo el tiempo.
– La serie se estrena muy cerca de la película de Ridley Scott. ¿Confiás en que el público los acompañe?
– No vi el filme de Ridley Scott, pero nuestra historia dura diez horas. Creo que la diferencia entre hacer una película y una serie es que los filmes son increíblemente impacientes. Comen la trama como un tiburón, es todo sobre la historia, tenés que seguir contando, moviéndote todo el tiempo. Con la TV tenés tiempo. En vez de ir por la autopista de la narración, podés salir y tomar caminos más pequeños, pasar por los pueblitos a lo largo del camino, que es por lo que tenemos tiempo durante un episodio entero para examinar lo que piensan los secuestradores.
– ¿Por qué creés que John Paul Getty I era como era?
– Es como que había perdido su corazón en algún punto e intentó reemplazarlo por otra cosa. Su hijo intentó llenarlo con drogas y él intentó llenarlo con dinero y sexo. Realmente no podía entender qué tenía de mala una negociación de seis meses. Para él era sólo un negocio. No iba a pagar el primer importe por el rescate de su nieto porque un hombre de negocios nunca paga lo primero que le piden. Es un personaje mucho más complejo que un simple villano y queremos examinar esa complejidad, explorar su posición y la incomprensible falta de empatía que también tuvieron sus hijos.
Télam.