El ex campeón olímpico de ciclismo y ex senador provincial Juan Curuchet admitió ayer que fue “un error” haber pasado del Frente para la Victoria al Frente Renovador y reveló que sufrió ataques de pánico antes de terminar su mandato de legislador.

“Estoy tomándome un tiempo para mí porque antes de terminar la política me agarré pánico. No era un mundo que manejara muy bien y terminé con algunos problemitas de salud”, contó Curuchet en declaraciones a Radio Continental Mar del Plata.

Dijo que en sus años de deportista de alta competencia “castigó al cuerpo”, lo que con los años se empieza a notar. “En este momento estoy abocado a recuperarme por algunas cosas que me han quedado en salud, y tengo que hacerlo porque todavía soy joven, tengo 53 años, y estaba un poco preocupado por cosas que me estaban pasando en el cuerpo”, reconoció.

Por eso, ahora disfruta cuando sale a tomar algo con sus hijos y hace “una vida totalmente diferente a la que hacía cuando estaba como senador provincial”. Por ejemplo, volvió a hacer deporte. “He bajado un poco la intensidad para poder recuperarme de mis problemas de salud”, insistió.

Curuchet terminó su mandato en diciembre del año pasado, pero en octubre fue apartado del bloque del Frente Renovador, junto con el también marplatense Gabriel Pampín, por “falta de compromiso y trabajo” durante la campaña, según informó en su momento la fuerza liderada por Sergio Massa.

Curuchet había llegado al Frente Renovador un año antes, después de dejar el Frente para la Victoria, el partido con el que llegó a la banca apuntalado por el entonces gobernador Daniel Scioli.

Pero ahora está arrepentido de aquel salto político. “Ese fue mi error. Hoy lo reconozco. Fue un error político mío. Lo hice por falta de experiencia. Tomé una decisión personal, en ese momento. Y creo que fue mi error político. Uno está en un espacio y se tiene que quedar porque fue donde logró… A veces se cometen errores y te sirven para crecer”, comentó.

Sin embargo, no se arrepintió de su paso por la política. “Hay que acordarse lo que era el CEF y lo que es ahora. La UPA N° 8, que está en Punta Mogotes, fue una gestión mía, personal. Entregué más de 30.000 elementos deportivos, tenía a 400 personas en diferentes comedores dándoles de comer todos los días. Terminé siendo el séptimo senador con mayor cantidad de proyectos de ley”, enumeró.

Con Scioli siguió en contacto por asuntos personales. “Mi hermano Gabriel tiene algunos problemitas de salud y él lo ayudó a (hacer) un viaje a Italia para que se pueda atender”, contó. Y apuntó: “Le tengo un reconocimiento por algo importante que hizo en mi vida, en una parte me ayudó muchísimo para lograr mi medalla olímpica, y de eso no hay que olvidarse”.