La policía allanó este sábado una casa del barrio Jorge Newbery en busca del principal sospechoso de haber matado a un hombre y herido a su hermano, pero no logró detenerlo.

El procedimiento se registró por la tarde en una vivienda de Alvarado y Wilde. Es decir, a menos de una cuadra del sitio en el que se produjo el hecho. A pesar de la velocidad del fiscal Fernando Berlingeri y de la Justicia de Garantías para identificar al acusado, no se registraron resultados positivos, ya que el hombre no se encontraba en dicho lugar.

A pesar del hermetismo de las fuentes consultadas, LA CAPITAL pudo saber que tanto el personal de la subcomisaría Jorge Newbery como de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) local cuentan con la autorización para detener al sospechoso de matar a Ariel Roldán, cuyos datos filiatorios no trascendieron. Por lo tanto, la búsqueda continúa.

Mientras tanto, Diego Roldán, el hermano de la víctima fatal, permanece internado en el Hospital Interzonal General de Agudos (HIGA). Los informantes de este medio señalaron que se encuentra estable.

Vale recordar que ambos fueron atacados pasadas las 17 de este viernes en Castelli y Wilde -ex 214-, cuando se encontraban con su otro hermano, que salió ileso. Los tres estaban en la vereda cuando comenzaron a discutir con otro hombre que estaba en una camioneta, con el que mantendrían problemas personales desde hace tiempo.

Tras esta situación, el conductor se fue, pero regresó a los pocos minutos. Entonces, bajó de su vehículo y, sin mediar palabras, disparó contra los tres hermanos: a Ariel Roldán lo mató prácticamente en el acto, mientras que otro resultó gravemente herido, para finalmente huir del lugar.

El tercero de los hermanos resultó ileso y llevó al herido, Diego Roldán, hasta el Centro de Atención Primaria de Salud Ameghino, en Luro al 10.000, desde donde resolvieron trasladarlo de urgencia al Hospital Interzonal ya que la bala había impactado en su abdomen. El hombre, de 40 años, ingresó al nosocomio gravemente herido y los médicos lograron salvarle la vida y estabilizarlo. En estos momentos permanece internado.

Fuentes consultadas por LA CAPITAL explicaron que los hermanos Roldán contaban con antecedentes por delitos menores, mientras que el sospechoso -que fue rápidamente identificado y es intensamente buscado por la policía- estuvo preso en el penal de Batán y cuenta con procesos penales por “encubrimiento” y otros delitos, aunque nada tan grave como un homicidio.

Aún se desconocen los motivos del crimen y qué fue lo que generó la discusión entre los Roldán y el asesino, pero los investigadores enmarcan el crimen en un claro ajuste de cuentas.