#CoopsDay: Reconstruir mejor juntos
Cooperativa Cura
Este 3 de julio se conmemoró el “99° Día Internacional de las Cooperativas” (#CoopsDay) bajo el lema “Reconstruir mejor juntos”, fecha que se celebra desde 1923 pero que se oficializó por las Naciones Unidas recién en 1995. Para dicha conmemoración, la Alianza Cooperativa Internacional (ACI), asociación independiente que une, representa y sirve a las cooperativas de todo el mundo, propone generar conciencia sobre el cooperativismo y “promover las ideas del movimiento de solidaridad internacional, eficiencia económica, igualdad y paz mundial”.
En el contexto actual de crisis económica y sanitaria debido a la pandemia del Covid-19, la ACI remarca la importancia de las cooperativas, “ya que ofrecen a las comunidades una recuperación centrada en las personas y respetuosa con el medioambiente”, fundadas sólidamente en los conceptos de solidaridad y resiliencia.
En el marco de la Economía Social y Solidaria, el cooperativismo nos propone una forma de organización productiva distinta a la de las empresas tradicionales, esas que conocemos mayormente, donde priman el fin de lucro, la competencia y el individualismo. En las cooperativas, en cambio, el bienestar de las personas es lo más importante: prevalece la reproducción de la vida (entendida desde sus aspectos tanto físico-psico-social como ambiental, espiritual y cultural) por sobre el valor del capital y, la horizontalidad por sobre el orden jerárquico verticalista.
En este sentido, las decisiones se toman de manera democrática, porque la propiedad de la cooperativa es conjunta, es decir, todas las personas asociadas que la integran son “dueñas” del emprendimiento que llevan adelante. Esto implica que los derechos y responsabilidades se definen autogestivamente en función de valores tales como la igualdad, la equidad y la ayuda mutua.
Por otro lado, las cooperativas tienen una doble responsabilidad: como empresas deben ser eficientes en su gestión y ser competitivas en el mercado y, además, por otra parte, tienen una responsabilidad social con su comunidad, en mejorar la calidad de vida de los asociados y en afianzarse en sus valores para construir una sociedad mejor. Esta responsabilidad social deviene de su meta de satisfacer las necesidades y aspiraciones de todas las personas, sin dejar a nadie atrás, y deriva en el fuerte arraigo que las cooperativas tienen en cada uno de sus territorios.
A junio de 2021, se encuentran registradas y vigentes en el INAES 12.031 cooperativas a nivel nacional, de las cuales 120 son Federaciones de Cooperativas y 5 son Confederaciones. En las cooperativas, se destacan las de Trabajo (70%), las de Servicios Públicos (10%), las Agropecuarias y las de Vivienda (6% cada una), las de Provisión (5%), siendo las restantes de Seguros, Consumo y/o Crédito.
En el Partido de General Pueyrredon la participación de cooperativas de trabajo aumenta notablemente, donde de 248 cooperativas vigentes, el 88% son Cooperativas de Trabajo de los más diversos rubros: profesionales de la salud, construcción, bioconstrucción, tareas de cuidado, seguridad, tareas de limpieza, choferes de taxis y remises, guardavidas, docentes, relacionadas con la pesca y la actividad portuaria, reciclaje y recuperación de residuos, producción de alimentos, servicios audiovisuales, de gráfica, de mensajería, de salud mental, entre muchos otros.
En nuestra ciudad, para cada necesidad existe al menos una cooperativa que puede cubrirla, convirtiéndose el movimiento cooperativo en una verdadera alternativa dentro de la esfera económica tradicional, generando trabajo digno para los marplatenses e instancias de autorrealización colectiva.
La situación económica actual no es fácil para casi ningún sector y, por supuesto, las idas y venidas entre fases de ASPO y DISPO por la pandemia del COVID-19 durante el último año y medio han afectado también a las cooperativas. Sin embargo, el movimiento cooperativo tiene dos grandes fortalezas que son la acción solidaria y el compromiso con la comunidad, características que sin lugar a duda son y serán una de las catapultas hacia la co-construcción del mundo post-pandemia.
En este sentido, Ariel Guarco, ex presidente de la ACI, ha señalado en diversos mensajes que “la acción solidaria es la respuesta a los problemas comunes”, ya que, en definitiva, las cooperativas son “la expresión viva de auto-organización de nuestras comunidades y la herramienta a su servicio para construir un futuro con responsabilidad y solidaridad”.
En esta misma línea, el Rector de la Universidad Nacional de Mar del Plata (UNMdP), Alfredo Lazzeretti, ha reconocido en celebraciones previas del Día Internacional de las Cooperativas la importancia de la Economía Social y el peso que tiene el Cooperativismo en particular para la economía mundial, recalcando que “a veces no hay conciencia de este esfuerzo, que cree que hay otra manera que no es la competencia sino la cooperación, que hay otra manera que no es el lucro sino la solidaridad”.
Esta visión del Rector de la UNMdP es la de muchas personas que formamos parte o acompañamos de distintas maneras a esta forma de trabajo, pero resulta especialmente interesante entender que la Universidad tiene como uno de sus pilares la Extensión, que implica el trabajo conjunto con la comunidad buscando contribuir a mejorar la ciudad y transformar la sociedad en una más justa, equitativa y en la que se revalorice su diversidad.
En este sentido, la forma de economía en la que opera el cooperativismo se constituye como el principal eje de trabajo del Grupo de Extensión “Economía Social y Solidaria (ESyS): otra economía posible” de la Facultad de Ciencias Económicas y Sociales, que desde hace cinco años viene trabajando en impulsar y fortalecer las organizaciones e iniciativas de la ESyS y poner en valor la identidad cooperativa.
A partir de este trabajo desarrollado desde el Grupo de Extensión y apoyado por las autoridades de la UNMdP, se comenzó a visualizar la necesidad de formación técnica en gestión y organización interna, así como también en aspectos legales, contables, impositivos y de comercialización, en el ámbito cooperativo y mutualista, generando como resultado el actual impulso de una Tecnicatura Universitaria en Cooperativismo y Mutualismo, destinada no sólo a integrantes de este tipo de organizaciones sino también a aquellas personas que quieran acompañarlas técnicamente desde una comprensión más acabada de su funcionamiento. Este es un gran logro del trabajo conjunto porque refleja el reconocimiento y el accionar concreto desde la Universidad en función de las necesidades planteadas por la comunidad.
En la última celebración presencial que realizamos en Mar del Plata del Día Internacional de las Cooperativas, un compañero batanense decía que “es fundamental volver a tomar el trabajo como eje central del cooperativismo”, y agregaba: “Yo estoy convencido de que el futuro del trabajo en el mundo va a ser el sistema cooperativo por lo que es muy importante que empecemos a laburar en conjunto”.
En ese camino estamos. ¡Feliz Día Internacional de las Cooperativas!
Por Grupo de Extensión Economía Social y Solidaria (ESyS): otra economía posible
Virginia Giustina y Noelia Garcia
[email protected]