Por Marcelo Solari

La confianza y la motivación suelen ser factores importantísimos en cualquier orden de la vida. También en el básquetbol. Con el ánimo por las nubes, Quilmes, sobre todo en Parque Luro, se les anima a todos. Anoche venció con autoridad al equipo de mejor récord de la Liga Nacional: Ciclista Olímpico.
Esgrimió como argumentos una defensa sensacional, con lucidos trabajos de sus internos para controlar a Justin Williams, y otra noche destructora de Walter Baxley (39 puntos), para un marcador final de 89 a 74.
Como buen líder del torneo, al menos en su Conferencia, Ciclista Olímpico llevó la voz cantante en los primeros tramos del cuarto de apertura. Quilmes dependía pura y exclusivamente de Baxley (anotó los primeros 7 puntos de su equipo) y si bien no sufría demasiado atrás, un triple de Diego Guaita abrió la primera luz (9-13).
Entonces llegó el tiempo de Quilmes, que de allí en adelante, a partir del minuto 7, redondeó una gran primera mitad.
Mientras Chris Cayole no podía con Baxley y le dejaba su lugar a Mauro Cosolito, un triple de Ivory Clark a 45 grados sobre la derecha puso al frente al local (14-13).
El desgaste de la dura lucha interior le costó dos faltas a Tayavek Gallizi, pero también se cargó con dos foules Williams. Y el bandeño sintió su salida.
Un enorme triple de Baxley (14 puntos en el cuarto) para rubricar una genial jugada colectiva alejó al local (21-14) y otro triplazo de Clark desde 9 metros al unísono con la chicharra provocó una explosión de júbilo en Once Unidos. Indicios de que podía ser la noche.
No volvió bien del primer descanso el local, aunque Luca Vildoza cortó una sequía de casi 2 minutos atacando el aro. Y entonces, el “tricolor” recuperó el aplomo. Defendiendo muy bien, con presión sobre la pelota y mucha intensidad, pero también con paciencia adelante, con mucho pase para encontrar tiros limpios (6/15 en triples, 40%).
Precisamente un triple de Maciel estiró las cifras a 41-28 y la rotación, con un excelente ingreso de Alejandro Spalla, aportó minutos de calidad sin perder precisión ni solidez. La máxima llegó a ser de 15 (46-31). Era el éxtasis total, aunque el visitante logró acortar antes del descanso largo, al que Baxley llegó con 20 puntos (tiró para 27) en su cuenta personal.
Los primeros siete minutos del tercer cuarto (8-8) fueron los más enredados de todo el partido. Con algo más de presencia defensiva de Justin Williams, el visitante consiguió maniatar al “tricolor” pero no logró progresar adelante.
Sin embargo, cuando Williams fue al banco, Baxley se decidió a atacar el aro con instinto asesino. Anotó de todas las formas posibles y logró que su equipo conservara el margen en torno a 9/10 puntos.
El escolta continuó encendido en el último segmento y la ventaja aumentó a 71-55. De todas maneras, nada estaba resuelto. Olímpico tiene un plantel de calidad, y Quilmes debía jugar posesiones largas en lugar de tirar a los 15 segundos.
Guaita empezó a sumar seguido de tres puntos y en algún momento los santiagueños amenazaron con arrimarse con cierto peligro. Pero desde el comienzo de la noche había señales de que podía ser para Quilmes. Y fue nomás. Con el corazón y con juego, todavía sueña con recuperar el terreno perdido.

La síntesis

Quilmes 89

L. Cequeira 8, L. Vildoza 4 (x), W. Baxley 39, I. Clark 6 y T. Gallizi 4 (FI). D. Romero 9, B. Sansimoni 0, M. Maciel 12, A. Spalla 7, F. Calvi 0. DT: Leandro Ramella.

Ciclista Olímpico 74

M. Stanic 13, F. Van Lacke 12, C. Cayole 13, D. Guaita 15 y J. Williams 11 (FI). M. Cosolito 6, D. Phillip 4, E. Cantarutti 0, M. Corzo 0. DT: Fernando Duró.
Estadio: Once Unidos.
Arbitros: Pablo Estévez y Leonardo Zalazar.
Parciales: 24-16, 46-36 y 62-53.