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La Ciudad 22 de noviembre de 2020

Con casi 30 grados, así se vivió el domingo en las playas de la ciudad

Mar del Plata vivió una jornada de verano y la costa se llenó de marplatenses disfrutando de la arena y el mar.

En un domingo con sol y una temperatura que llegó a los 29,8 grados, los marplatenses se volcaron en masa a las playas, días antes del inicio de la temporada.

¿Dónde nos ponemos? Esa pregunta tan habitual en verano, no se pensaba oír tan pronto cuando meses atrás el encierro era el principal escudo para combatir el Covid-19. La situación epidemiológica dio un poco de tregua, el clima de noviembre acompañó y la arena se llenó de gente.

Este fin de semana largo fue el momento de mayor goce al aire libre y quizá un pequeño modelo de lo que ocurrirá diariamente a partir del 1 de diciembre. Las temperaturas fueron altas y el descanso cerca del mar fue un atractivo inevitable para muchos. Incluso, se sumaron cuatro mil propietarios no residentes que optaron por pasar estos días de calor en Mar del Plata.

El domingo, la temperatura superó la barrera de los 20 grados desde la mañana. Por eso, las primeras horas del día fueron las elegidas para los fanáticos de las actividades deportivas en la costa, que se pobló de caminantes, corredores, patinadores y ciclistas.
También empezaron a llegar las primeras personas con los elementos indispensables para pasar un largo día de playa: reposeras, sombrillas, lonas, conservadoras. Familias numerosas con varios “tuppers” con comida y grupos de jóvenes con abundante bebida.

Pasado el mediodía, encontrar un lugar para estacionar pasó a ser un desafío enorme. En las playas del sur, muchos autos quedaron a la vera de la Ruta 11, mientras que para bajar a las playas céntricas muchos tuvieron que armarse de paciencia y fuerza para caminar cientos de metros. “No hay más lugar”, repitieron los “trapitos” felices por “la caja” que hicieron estos días, tras un año de bolsillos flacos.

Sobre la arena no faltaron los “picados” cerca de la orilla, las atrapantes lecturas o los partidos de tejo en familia. Y mantener la distancia social fue una tarea casi imposible en varias playas de la ciudad.

Los más osados y acalorados se animaron a los primeros chapuzones: pocos permanecieron más de dos o tres minutos dentro del agua. Mientras que los amantes de los deportes acuáticos disfrutaron con sus tablas y remos durante largas horas en el mar.

Este lunes se cerrará un fin de semana largo que dio algunos indicios y planteó interrogantes de cara a la temporada. “Si tenemos una foto de playas repletas, (la temporada) en lugar de un éxito va a ser un fracaso”, le dijo un mes atrás a LA CAPITAL el ministro de Turismo y Deporte, Matías Lammens. Si bien ahora la situación epidemiológica es menos agobiante, se mantiene latente la posibilidad de un rebrote de coronavirus. Con la llegada de turistas, las playas indefectiblemente se llenarán de personas y la posibilidad de contagios masivos crecerá. Será un gran reto para las autoridades saber administrar el espacio disponible y para marplatenses y turistas cumplir con los protocolos vigentes.