Frases hechas, palabras que alientan el doble sentido, lugares comunes, un absurdo delirante y una pareja que habla y habla e intenta e intenta comunicarse, sin logarlo: el lenguaje usado como escalera hacia el vacío. Con esos elementos, la obra “Disparate” maravilla, entusiasma y no pierde vigencia.

Escrita por Guillermo Yanícola y actuada por él y por la actriz Claudia Mosso durante catorce años –se estrenó el 8 de enero de 2004-, “Disparate” se convirtió en un clásico del teatro independiente marplatense. Ni la prematura muerte del dramaturgo, ocurrida en 2019, logró apagar la llama que enciende esta historia.

“Yo pensé que cuando empezáramos a ensayar en vivo se iba van a empezar a bajar, pero no se bajó nadie y además se seguía ofreciendo gente”

El elenco que actuará este domingo en Cuatro Elementos.

Por eso regresó a escena, renovada. Fue la misma Mosso la que decidió dirigir la obra, pero en vez de convocar a una pareja, abrió el juego: son seis parejas las que cuentan “Disparate”, divididas en dos elencos. Una función le toca a un elenco, la otra al siguiente. Así transcurrió toda la temporada de verano y los meses de invierno, con un dato nada menor: siempre alcanzó una buenísima convocatoria de público.

Este domingo regresará a escena: a las 19.30 se la podrá ver en Cuatro Elementos Espacio Teatral (Alberti 2746) con Hebe Amancay Rinaldi, Fausto Ruidiaz, Carla Areta, Maxi Mena, Viviana Gimenez y Robert de Large.

El otro elenco es el que integran Gabriel Celaya, Cecilia Mesías, Milena Bracciale, Julio Palay, Belén Manetta y Leo Rizzi.

“Siempre trabajamos a sala llena, viene mucha gente joven, de los colegios secundarios, se generó una movida en adolescentes a los que les gusta el teatro, estamos encantados, están redescubriendo Disparate”, entendió Mosso.

Y consideró que la pieza califica para estar dentro de las llamadas “obras redondas”. “Fascina al espectador porque te hace reír, pensar, te identificás, hay partes en la que no podés dejar de ver a alguien de tu familia o algo tuyo -indicó-. Tiene un formato atractivo de ver y de disfrutar pero a la vez tiene mucho para reflexionar. Es una obra deliciosa para ver y para hacer”.

-¿Cómo se te ocurrió reponerla pero con dos elencos de tres parejas cada uno?

-En la pandemia teníamos tanto tiempo para pensar. Me junté con Fausto Ruidiaz, quien había trabajado con Guille en la última etapa y hablamos de seguir manteniendo viva la obra de Guille. Entonces surgió la idea de convocar a algunos directores para que hagan obras de Guille con nuevas miradas. Yo dije: “A mi me gustaría hacer una puesta de Disparate”. Yo no soy tan directora, soy más actriz, pero esta es una obra que conozco al pie de la letra. Cuando empezamos a pensar en los actores, muchos me decían “yo quiero estar”. Pusimos que tenían que ser actores que hubieran trabajado con Guille. Cuando se cumplió un año de su muerte, en 2020, hicimos una transmisión vía Facebook y preparamos algo con los chicos. Yo pensé que cuando empezáramos a ensayar en vivo se iba van a empezar a bajar, pero no se bajó nadie y además se seguía ofreciendo gente. Después se me ocurrió la idea de separar los elencos, armé los grupos de acuerdo a cómo me parecía que funcionaban las parejas y ahí siguió. Pensamos que era una euforia del momento pero la verdad es que nos superó lo que pasó con la gente.

Julio Palay, Gabriel Celaya, Leo Rizzi, Belén Manetta, Milena Bracciale y Cecilia Mesías, el otro elenco de “Disparate”.

-¿Participaste del proceso de escritura de “Disparate” junto a Yanícola?

-Cuando Guille me la dio me dijo: “Tomá, quiero que hagamos esta obra”. Pero después en el proceso creativo sí tuve aportes con respecto a la dirección, cosas que surgieron de los ensayos, pero con respecto a la puesta en escena. Guille la escribió pensando en que la iba a hacer yo, quería que fuera la actriz. Tiene muchas cosas del humor que compartíamos. Para mi fue un gran honor porque éramos muy amigos, como hermanos.

-Ustedes dicen que es una obra fundacional del teatro marplatense, ¿por qué?

-Eso fue un concepto de Milena Bracciale. Ella es historiadora del teatro marplatense. Cree que “Disparate” marca un momento, como que se empieza a definir más el teatro marplatense, o a tomar un poco más de vuelo, llega a otros sectores. Nuestro camino en el teatro independiente fue de mucho laburo y en un momento empezamos a sentir que la gente nos empezó a ver. Se generó toda una cadena de espectadores que ahora circulan por los centros culturales y eso lo generamos nosotros. Los marplatenses somos capaces de hacer una obra redonda.

-Explota la capacidad ambigua del lenguaje.

-El texto es verborrágico. Las parejas hablan todo el tiempo pero no se comunican, no se entienden, no pueden mantener un contacto, usan la palabra para no comunicarse. Es una obra muy argentina, está trabajada desde el absurdo.

-Esta obra integra el Proyecto Yanícola, ¿cómo sigue este proyecto?

-En septiembre tenemos la apertura del Festival Yanícola, habrá muchas cosas divertidas, que recuperamos de años atrás, de cosas que hacía Guille. El otro elenco de Disparate abrirá el festival. También vamos a hacer Universo Yanícola, recopilamos escenas de otras obras. Además, estamos viendo de hacer “Los fines”, que es otra obra maravillosa, para el verano. Y vamos a seguir con una segunda temporada de “Disparate”. También se viene el Festival Salvatti, con dirección de Olivia Diab. Hay obras de Guille que se estrenaron en Río Gallegos, en Paraná, en Buenos Aires. La obra de Guille está, la gente la está descubriendo.