El cibercrimen creció exponencialmente durante la pandemia y al uso excesivo de tecnología para evitar la presencialidad, principalmente  a la posibilidad de obtener créditos precalificados por home banking.

Según cifras oficiales de la Fiscalía N° 10, que se encarga de investigar los delitos económicos en Mar del Plata, en lo que va de este 2021 se registraron 297 estafas en las que los delincuentes acceden al home banking de las víctimas, le piden un crédito y le vacían la cuenta.

Los montos en cada estafa dependen de la capacidad financiera de cada persona, que puede rondar entre los 100.000 y 500.000 pesos.

“Esto genera un conflicto entre la gente y entidades bancarias. Sin embargo los bancos tienen otro planteo, que tiene que ver con que el acceso ha sido aportado por la víctima en violación a las normas”, explicó el fiscal Javier Pizzo en charla con LU6 Radio Atlántica.

El fiscal Pizzo explicó que estos delincuentes forman organizaciones con un alto nivel operativo y creativo para comer estafas, que operan desde otras provincia para dificultar la acción penal. En la distribución de roles, en fiscal explicó que utilizan “muleros”, que son personas que sacan cuentas en diferentes bancos o financieras donde los estafadores depositan el dinero ni bien consiguen entrar en el home banking de las víctimas.

“Desde el poder judicial, con la carencia de recursos que tenemos, vamos tardar un tiempo que no siempre satisface a la gente. Estos delitos deben prevenirse”, remarcó el fiscal y agregó: “El cibercrimen es mundial, y los países van adaptando sus legislación, pero hay que insistir en la prevención”.

El fiscal Pizzo recomendó no abrir mensajes, sean por mail o celular, que inviten a brindar claves personales.

En cuanto a estafas en operaciones virtuales, el fiscal instó a no realizar transacciones económicas a través de redes sociales o al menos buscar antecedentes de las personas. .

“Estamos siendo todos sometidos a ataques de ciber crimen y tenemos que estar atentos”, concluyó el fiscal que hace días recibió un mail de estafadores que le pedían sus claves de home banking.