PEKIN, China.- Dragones, tambores, kung-fu y bailarinas son algunos de los elementos más representativos de la cultura china tradicional que se unen para celebrar el Festival de las Linternas, que marca el fin de dos semanas de festejos del Año Nuevo lunar en el país asiático.

Esta celebración, que data de hace más de dos mil años, llega a todos los lugares de China y cuenta como estrella con las “huadeng”, linternas esféricas de color rojo que representan la buena suerte y que se instalaron como uno de los símbolos chinos más reconocibles a nivel internacional, según consignó la agencia EFE.

Estos farolillos, tradicionalmente de papel, decoran los templos, pero también avenidas, plazas, parques y hasta carreteras para despedir las celebraciones del Año Nuevo chino, que arrancan con la luna nueva y terminan catorce días después con la llegada de la primera luna llena del calendario.

La gastronomía, como en la mayoría de festividades del país, tiene un papel importante entre las costumbres del Festival de las Linternas donde son típicas unas pequeñas albóndigas dulces llamadas “yuanxiao” -el mismo nombre en chino que el del Festival-, hechas con harina de arroz glutinoso y rellenas de pasta de judías, azúcar o frutos secos.

En el sur de China, aparte de tener más variedad en el relleno -no solo son dulces, sino que pueden estar rellenas de carne y verduras- su nombre cambia a “tangyuan”, cuya pronunciación es similar a la palabra que en mandarín significa reunión, por lo que tradicionalmente estas bolitas evocan la unión familiar y la felicidad.

Este fin de semana sirve para despedir el ambiente festivo de los últimos días y, con ello, se sirven los últimos banquetes familiares y se lanzan los últimos fuegos artificiales.