Cerró una planta de reciclado ante la falta de separación de residuos en origen
Por mes, la empresa Recilados Mar del Plata llegó a procesar 120 toneladas de Pet (botellas de gaseosa y agua mineral). Empresarios advierten que, en los últimos años, comenzó a bajar la cantidad de envases para reciclar.
Reciclados Mar del Plata decidió cerrar sus puertas en agosto del año pasado, tras siete años de funcionar en la ciudad, y luego de registrar, durante varios meses consecutivos, una considerable baja en la cantidad de envases aptos para un proceso de recuperación y su posterior comercialización.
La empresa, que un principio se había instalado en el Parque Industrial pero luego -por proyectos de ampliación- se trasladó a una planta sobre la calle Azopardo, cumplía un rol fundamental en la región como principal receptor de fardos de botellas de PET (botellas de gaseosa o agua mineral), provenientes de las diferentes plantas de clasificación de RSU y recuperadores informales, y transformando este material en escamas de PET, que constituyen la materia prima para la fabricación de productos de alto valor agregado.
Sin embargo, la falta de políticas públicas orientadas a fomentar la separación de residuos en origen, sumado a que Mar del Plata comenzó a ser noticia, a partir de 2016, por el mal estado y abandono del Complejo Ambiental de Tratamiento de residuos sólidos, llevó a los empresarios a tomar la decisión de cerrar la empresa.
“Empezó a bajar la cantidad de insumo de envases para reciclar, y al bajar la cantidad de producción, también bajaron los precios de compra”, indicaron desde la firma. El establecimiento, con una capacidad tecnológica aún instalada, quedó fuera de funcionamiento.
“Hoy estamos con ganas de volver a funcionar pero mientras que la ciudad no ponga en funcionamiento un plan de separación en origen es muy difícil, casi imposible”, señalaron.
Y agregaron: “Nosotros podríamos ser compradores del material producido por la cooperativa Cura y por los recicladores informales del Playón, y a mucho mejor precio del que hoy reciben. E inclusive podríamos brindarles ayuda y material para trabajar”.
La historia de la empresa
Con el advenimiento de políticas orientadas al tratamiento de residuos y al buen recibimiento que tuvo en la población local las campañas de separación en origen, las autoridades de Reciclados Mar del Plata vieron en la ciudad las condiciones necesarias para el desarrollo y crecimiento de una empresa que tenía la mira puesta en exportar a Brasil el producto obtenido del reciclaje.
De hecho, en 2015 construyeron lo que llaman “la nave de 6 metros de altura, 25 metros de ancho y 75 metros de largo”, compraron maquinarias de reciclaje de primera calidad en Brasil y comenzaron a producir.
De esta manera, según señalaron, lograron obtener un picado de Pet de alta calidad que incluso llegó a ser aceptado por Ecopek, la planta instalada en Tigre que recicla botellas plásticas para fabricar nuevos envases para marcas de gaseosas nacionales e importadas .
“Incluso debido al gran consumo de agua que requiere el proceso productivo se invirtió en un circuito de reutilizacion del agua de lluvia y del usado en el proceso. Así, esta planta se convirtió en la única por su alta tecnología de la provincia de Buenos Aires junto con Ecopek”, señalaron desde la empresa.
La empresa llegó a trabajar 120 toneladas de material por mes, recibiendo materia prima de distintos puntos: ciudades vecinas, municipios y escuelas. Pero insisten en que sus planes de crecimiento estaban apoyados en el crecimiento de la separación de Residuos de Mar del Plata y Batán.