por Marcelo Solari

Vivió su mejor semana en mucho tiempo. Con argumentos sólidos, Quilmes superó anoche ampliamente al vigente campeón, Quimsa de Santiago del Estero, por 96 a 82, para ratificar su presente en alza. Una muy buena actuación le permitió así al “tricolor” cerrar una dura serie de tres partidos en Once Unidos con pleno de victorias, sobre Lanús, Libertad y anoche ante Quimsa. De esta forma, los de Luro y Guido continúan alejándose del fondo de la tabla la Conferencia Sur de la Liga Nacional de Básquetbol.
En un cuarto de apertura de ida y vuelta, Quimsa lució levemente mejor en el arranque, con una magnífica producción ofensiva de Gabriel Deck.
Sin embargo, con carácter e intensidad, Quilmes disimuló cierta fragilidad atrás con gran decisión adelante y repartiendo bien las responsabilidades de tiro.
Y en realidad, el calificativo de frágil tuvo más que ver con la cantidad de puntos recibidos en el segmento inicial (25) que con la calidad defensiva. Porque es cierto que penó con Deck y Nicolás Romano (entre ambos anotaron 19 de los 25 puntos santiagueños), pero el resto de los visitantes casi no aportó.
Con más y mejores variantes ofensivas, el “tricolor” se mantuvo al acecho y empezó a imponer una supremacía cuando Robert Battle cometió su tercera falta personal y Diego Romero empezó a ganarle repetidamente el duelo interior a Damián Tintorelli.
Estaba muy bien el local, aunque el inconveniente fue la tercera falta de Romero hacia la mitad del segundo cuarto.
No obstante, Fernando Calvi entregó un gran aporte para mantener a raya al adversario. Y tras un tiempo muerto solicitado por Leandro Ramella, Quilmes afrontó un intento de defensa zonal con buena buena circulación y pase adicional para un triple de Luca Vildoza: 42-37. El local Quilmes tenía buena lectura y también buena ejecución.
Pero ante un rival que no sólo es el campeón vigente, sino que también cuenta con individulidades de enorme jerarquía, no podía tomar distancias en el resultado.
Y eso que mantuvo muy alto el standard de acierto en tiros de tres puntos (5 de 10, para un elevado 50%).
El inicio del segundo tiempo fue un festival de juego y pases. Con una lúcida conducción de Luis Cequeira, la brecha de abrió rápido (57-46 en poco más de dos minutos) y Quimsa comenzó a desnudar fisuras de rendimiento colectivo y carencia de respuestas anímicas.
Encima, llegó la cuarta falta de David Jackson y Quilmes, aún con Baxley apresurado e impreciso y Vildoza no tan certero como otras noches, dominaba casi a voluntad. Porque Romero (17 puntos y 9 rebotes) hacía todo bien y el resto metía y metía, más concentrado e intenso que un rival sin rumbo.
La gente presente en Once Unidos no daba crédito, pero el resultado reflejó 20 puntos de diferencia (¡73-53!) y además Baxley convirtió sus únicos puntos del capítulo para elevar la máxima a 22.
Aún quedaban 10 minutos, pero ya no había margen alguno para un posible vuelco. Aunque enfrente estuviera el campeón.
Quilmes continuó defendiendo con ahínco, limitó a la mayoría de los hombres del equipo “fusión” y Baxley, con algunas corajeadas, y Gallizi, cortando por el eje para recibir una y otra vez de Cequeira, aportaron un caudal valioso de puntos. Aunque suene raro, fue demasiado Quilmes para tan poco Quimsa. O, tal vez, una demostración de que aquella chance que se escapó en el estadio “Ciudad” no era tan lejana a la realidad.

Síntesis

Quilmes (96): L. Cequeira 11, W. Baxley 18, E. Ruiz 12, M. Maciel 5 y T. Gallizi 15 (FI). D. Romero 17, L. Vildoza 7, F. Calvi 8, A. Spalla 0, B. Sansimoni 3, A. Lecona 0. DT: Leandro Ramella.
Quimsa (82): N. Gianella 2, D. Jackson 5, G. Deck 21, N. Romano 21 y R. Battle 5 (FI). D. Tintorelli 7, D. García 7, L. Pérez 6, R. Haag 3, G. Romero 0, L. Riego 3. DT: Silvio Santander.
Estadio: Once Unidos.
Arbitros: Alejandro Ramallo y Jorge Chávez.
Parciales: 23-25, 48-42 y 75-55.

La despedida de Ruiz

No todas fueron buenas noticias en la noche de ayer para Quilmes, ya que el alero Enzo Ruiz jugó su último partido con la camiseta “tricolor”.
El santiagueño, de 27 años y 1,95 metros, llegó con la temporada iniciada y actuó en 29 partidos, con promedios de 9,2 puntos, 2,8 rebotes y 1,6 asistencias en 28,5 minutos.
Si bien su rendimiento fue mejor al principio, es evidente que la desvinculación no tiene que ver con una cuestión deportiva.
Según se supo anoche en Once Unidos, Ruiz firmará la rescisión mañana, y ese mismo día el club emitirá un comunicado oficial sobre los motivos del fin de la relación. Sin embargo, trascendió que hay equipos interesados en contar con sus servicios, entre ellos, Regatas Corrientes y Gimnasia y Esgrima de Comodoro Rivadavia.
Por otra parte, anoche presenció el partido el ala-pivote estadounidense Ivory Clark, quien dejó un muy buen recuerdo en la temporada pasada. Dicen que la dirigencia “tricolor” está tratando de convencerlo (el equipo de Leandro Ramella tiene la segunda ficha extranjera libre, tras el alejamiento de Jonathan “JT” Durley), aunque la cuestión económica sería una traba muy importante.