Cebollita campeón
Maradona dio su primera vuelta olímpica y se colgó su primera medalla en los Juegos Evita. Una historia de deporte e inclusión.
Por Vito Amalfitano
La primera vuelta olímpica de Maradona fue en los Juegos Evita. Y el camino hacia ese título empezó con un golazo en el Monumental. La final del distrito Capital Federal de los Evita 73 se llevó a cabo el sábado 8 de diciembre en el estadio de Nuñez y Los Cebollitas derrotaron a River por 5 a 4. “Diego hizo dos goles, uno maravilloso, arrancando desde su campo hasta entrar al arco con la pelota”. “Ese final es la única diferencia” con el más extraordinario gol de la historia de los mundiales de fútbol, el que le convertirá a Inglaterra en México 86.
Esa y otras increíbles historias están contadas de una forma inmejorable por el reconocido periodista Guillermo Blanco en el libro “Los Juegos Evita, La historia de una pasión deportiva y solidaria”, de Editorial Octubre.
“ –¡Qué vamos a anotarnos si ni camisetas tenemos! –exclama escéptico uno de los pibes reunidos en la pieza humilde del conventillo.
–¡Pero si Evita nos da todo… Camisetas, pantaloncitos, zapatillas… Y hasta jugaremos en los grandes estadios! –trata de convencerlo el recién llegado con la información fresca… (…)
Y en los hogares, los padres estarán pensando que sus hijos podrán acceder a una revisación médica, algo impensado a nivel masivo por aquellos tiempos…”
Diálogo y consecuencia del comienzo de una historia bellísima para el deporte argentino.
Así fue la prehistoria: “El periodista y relator de fútbol Eduardo ‘Lalo’ Pellicciari, ícono de entonces, le alcanza a Evita una idea madurada con Emilio Rubio, jefe de Deportes del vespertino Noticias Gráficas: la concreción de un gran movimiento deportivo infantil a nivel nacional –en principio futbolístico– con grandes clubes cediendo sus estadios. La idea prende rápido y llega a oídos del médico infectólogo santiagueño Ramón Carrillo –secretario de Salud desde dos años antes y desde 1949 primer ministro de Salud de la Argentina–, quien vislumbra una forma práctica para lograr una merma importante en las necesidades sanitarias de la población, una obsesión del facultativo. Su tarea tendrá en el deporte social a un aliado ideal”
“Sin dudas, el doctor Carrillo fue un visionario para la época, al procurar generar estadísticas públicas a través de un programa de alcance nacional para el diseño de políticas públicas en materia de salud”, suscribió Víctor Santa María en el prólogo de la obra de Guillermo Blanco.
Los Juegos Evita, en efecto, fueron concebidos como un gran programa de salud, una herramienta para la inclusión, desde la Fundación Eva Perón. El golpe del 55 intentó borrarlos de la memoria colectiva pero tuvieron una fugaz reaparición entre 1973 y 1975, pero que, casi como en una metáfora mágica del deporte argentino, sirvió para la primera vuelta olímpica de Diego. La gran noche del golpe cívico militar del 76 cortó otra vez el programa, que recuperó en 2004 el presidente Néstor Kirchner. Desde el 2008, con Cristina Fernández de Kirchner como presidenta, los Juegos Evita son Ley Nacional. Ambos con Claudio Morresi como Secretario de Deportes.
Justamente, en el Hermitage Hotel de Mar del Plata, Cristina presentó el Plan Nacional del Deporte 2008-2012, con palabras que, de acuerdo a Blanco, “recuerdan a otras similares pronunciadas por Evita en épocas fundacionales”.
“Entendemos la necesidad de darles más recursos y más de nuestro esfuerzo a todos los jóvenes deportistas argentinos. El Plan Nacional del Deporte es una política de Estado (…) El deporte ayuda a construir vínculos necesarios para que todos juntos podamos ser una mejor sociedad…”, dijo en esa oportunidad Cristina. “En las dos primeras filas escucharon el ciclista marplatense campeón olímpico Juan Esteban Curuchet; su hermano Gabriel, múltiple campeón argentino y dirigente principal del ciclismo argentino; Silvio Velo y Diego Cerega, de Los Murciélagos; el nadador Guillermo Marro; el atleta Alejandro Maldonado; la judoca Paula Pareto (ahora campeona olímpica, consagrada en Río 2016); el garrochista Germán Chiaraviglio y la boxeadora Marcela ‘La Tigresa’ Acuña”, recordó Guillermo Blanco en su libro.
Los Juegos Evita. Historia de una pasión deportiva y solidaria. El deporte es salud. Lo escribió el periodista que para El Gráfico hizo la primera nota con Pelé y Maradona juntos. Y el que luego fue jefe de prensa de Diego. Aquel Cebollita del gol increíble en el Monumental. Cebollita campeón.