Por Sebastián Arana

El debut de Alvarado en la Primera Nacional de fútbol no fue el que sus hinchas soñaban. En pleno proceso de formación, ni jugó bien, ni sumó. Algo que ingresaba en el terreno de la lógica. Agropecuario de movida le tiró su oficio en la categoría, le convirtió dos goles en los primeros veinte minutos y, en definitiva, le ganó 2-1 por la primera fecha de la Zona A.

Así como River destrozó a Racing aprovechando esos minutos de confusión que suelen suceder a un gol en el equipo que lo recibe, Agropecuario antes de los veinte minutos paralizó a Alvarado con dos tantos consecutivos, separados por un minuto, y después controló sus tibios embates casi toda la tarde-noche.

Antes de ese 1-2 mortal de los de Carlos Casares, el equipo marplatense había generado un par de aproximaciones (un centro de Becker seguido de un cabezazo muy alto de Giordana y una jugada individual del ex Rosario Central culminada con un remate también muy desviado de media distancia), pero el dominio de la situación correspondió a los visitantes.

Agropecuario se plantó en el “José María Minella” con autoridad. Con orden, pero con intención de jugar en campo rival. Con Defederico muy movedizo delante de la línea de tres volantes. Le faltaba el último pase, pero enseguida le rodeó la manzana a un Alvarado superado.

Y, cuando pegó, fue letal. A los 17′ Defederico ejecutó con precisión un tiro de esquina desde la derecha y Narese lo conectó en el primer palo con un cabezazo cruzado que dejó sin chances a Degrá.

Alvarado no había terminado de lamerse la herida cuando Gagliardi, con una oportuna “peinada” hacia atrás, abrió el camino para el pique demoledor de Mariano Miño, quien en la puerta del área grande advirtió el adelantamiento del arquero y sacó un derechazo alto y cruzado que se metió en el ángulo superior derecho. Iban 18 minutos.

Fue demasiado para un Alvarado en formación, “livianito” en los últimos metros de la cancha, dependiente de algún desborde de Gentile o de algún arranque inspirado de Becker.

Sin embargo, el primero casi nunca pudo superar a Dematei. El ex Rosario Central, por su parte, aún con intermitencias, provocó que los hinchas de Alvarado se levantaran un par de veces de sus asientos. Un centro suyo, a los 43’, se cerró peligrosamente y Perafán tuvo que exigirse para salvar. El manotazo del arquero rebotó contra el travesaño, volvió a la cancha y Giordana, desde muy buena posición, remató totalmente desviado.

No fue mucho más auspicioso el segundo tiempo para Alvarado. Tuvo el dominio territorial del partido. Pero le faltó desborde y no pudo imponer un ritmo que incomodara a los visitantes, abroquelados toda la noche en una especie de zona de confort.

Agropecuario, por otro lado, no quiso más. Se enfocó en no perder el orden y dejó para mejor ocasión cualquier tipo de aventura ofensiva. Sin proponérselo, sin embargo, casi llegó al tercero. A los 9′ Zules Caicedo se “embarulló” dos veces en una salida de fondo y terminó perdiendo el balón ante Defederico, quien dejó a Gagliardi frente a frente con Degrá. Pero el ex Nueva Chicago remató desviado y dejó pasar la chance de liquidar el partido.

Pumpido procuró ganar en agresividad cambiando a los mediocampistas por los costados. Lucero ingresó por Becker y, más tarde, Rinaldi por Gentile. Los resultados fueron idénticos. El equipo siguió sin desbordar y los delanteros sin tocar casi la pelota.

De todos modos, a los 34′, Lucero y Rinaldi se encontraron y Alvarado casi llega al descuento. El primero ejecutó un gran cambio de frente de izquierda a derecha y el “Flaco” lo empalmó en el segundo palo con una volea alta.

Parecía que podían jugar hasta medianoche y el equipo local no iba a poder hacer un gol. Pero a los 44′ forzó un córner y llegó a un descuento inesperado. Lo ejecutó Vidal, lo “peinó” Zurbriggen en el primer palo y lo empujó Zules Caicedo a la red en el segundo.

Ese tanto generó un clima de vuelco. Alvarado, con muchas ganas, se fue encima de Agropecuario y le rodeó la manzana. Pero no pudo forzar algo más que algún rechazo angustioso, ni mucho menos torcer la historia.
El equipo marplatense pagó caro su mal comienzo. Primer contacto aleccionador con una categoría más severa con los errores que las anteriores.

Síntesis

Alvarado (1): Degrá (5); Matías Caro (5), Zules Caicedo (4), Zurbriggen (5) y Oliva (5); Gentile (5), Teijo (5), Pablo Ledesma (5) y Diego Becker (6); Giordana (5) y Patricio Vidal (4). DT: Juan Pablo Pumpido.

Agropecuario (2): Perafán (6); Narese (6), Parnisari (6), Lucas Vesco (6) y Dematei (6); Emiliano Tellechea (5), Jonatan Blanco (5) y Emanuel Molina (6); Defederico (6); Mariano Miño (7) y Alejandro Gagliardi (6). DT: Felipe De la Riva.

Goles: en el primer tiempo, 17′ Narese y 18′ Miño; en el segundo tiempo, 44′ Zules Caicedo.
Cambios: en el segundo tiempo, 18′ Gonzalo Lucero por Becker, 27′ Nicolás Rinaldi por Gentile, 28′ Fernando Juárez por Defederico, 37′ Canuhé por Teijo, 40′ Mauro Albertengo por Miño y 47′ Angel Gómez por Molina.
Cancha: Estadio “José María Minella” (buena).
Árbitro: Lucas Novelli (6).