Cae un ladrón que asaltaba comercios: vivía en un jardín de infantes usurpado
Carlos Lozano (36) era buscado por dos robos a mano armada cometidos el 5 y el 6 de febrero en un kiosco de la avenida Colón y en un supermercado del barrio Regional. En 2016 había sido condenado por un hecho similar y declarado, ya entonces, "reincidente".

El jardín de infantes usurpado en el que vivía el delincuente se ubica en la esquina de Avellaneda y Nasser.
Años atrás, el edificio ubicado en la esquina de Avellaneda y Nasser, en pleno barrio Regional, fue un jardín de infantes. Ahora, la propiedad está usurpada, se convirtió en una especie de complejo habitacional clandestino y viven adentro numerosas familias sin techo.
Una de las personas que habitaba el inmueble es Carlos Lozano, a quien la policía fue a buscar allí durante un allanamiento realizado sin éxito la semana pasada, pero al que detuvo este martes, casi inesperadamente, en el marco de un operativo de rutina.
Se trata de un hombre de 36 años con frondosos antecedentes penales que era buscado por robos a mano armada cometidos el 5 y el 6 de febrero en un kiosco y en un supermercado. En 2016, el Tribunal Oral Nº 4 había condenado por un hecho similar y declarado, en el mismo fallo, “reincidente”. Es decir, ya entonces, era un delincuente identificado para la Justicia.
La reciente búsqueda de Lozano fue ordenada por el fiscal Fernando Berlingeri, quien quedó a cargo de las respectivas investigaciones derivadas de los casos mencionados antes. Como principal sospechoso de haber cometido ambos, se supo que últimamente habitaba el jardín de infantes abandonado y usurpado, en el que hasta hay una pileta tipo Pelopincho.
Según pudo saber LA CAPITAL tras consultar distintas fuentes, el primero de los hechos ocurrió el 5 de febrero en un kiosco de Colón al 3500. Cerca de las 15, el ladrón ingresó en soledad y con un arma de fuego le apuntó a los empleados y también a un cliente, a quienes les robó luego dinero y un teléfono celular.
Al otro día, cerca de las 11.30, el mismo delincuente entró a un supermercado Toledo ubicado en Alberti al 6400 -a pocas cuadras del exjardín de infantes-, y otra vez a mano armada amenazó a los presentes. Entre ellos, estaba el personal del comercio, pero también tres compradores, uno de ellos con una niña, que iban en busca de productor para preparar el almuerzo.
Una vez reducidas las víctimas, el asaltante se hizo de su dinero en efectivo y del de la recaudación en las cajas registradoras. Pero antes de escapar, obligó a los trabajadores a que lo dirigieran al sector trasero del local, donde en una oficina hay una especie de caja fuerte, de la que acabó por sustraer, además, 76 mil pesos más.
Cuando arribaron al lugar los efectivos policiales y se entrevistaron con diversos testigos, una mujer les reveló que conocía al ladrón “del barrio” y, acto seguido, les dio su identidad. Así fue como comenzó la búsqueda de Carlos Lozano, quien en 2016 había sido condenado a la pena de 7 años y 6 meses de cárcel y declarado “reincidente” por otro robo.
Al cursar los datos en el sistema informático judicial y comparar la fotografía de prontuario del sospechoso con las imágenes del asaltante tomadas por las cámaras de seguridad del supermercado, el fiscal Berlingeri y sus colaboradores consideraron que se trataba de la misma persona.
En ese marco, se produjeron dos allanamientos cuyos resultados no fueron exitosos. Uno de ellos se realizó en el jardín de infantes usurpado de la esquina de Avellaneda y Nasser, en donde trascendió que vivía Lozano.
Finalmente, pasaron más días y este martes la misma policía que recorría la zona lo avistó en la vía pública y lo detuvo de inmediato. Ahora, deberá comparecer ante el fiscal, quien lo acusa por dos delitos de “robo agravado por ser cometido con arma de fuego” en distintos comercios.
Zona “picante”
La zona donde se ubica el jardín de infantes abandonado es “picante”, según una vecina con la que dialogó LA CAPITAL, y que prefirió mantener su nombre en reserva.
“No me acuerdo cuánto hace que está usurpado ese lugar, pero es peligroso. Toda esta zona es picante”, explicó la mujer, de aproximadamente 55 años.
Razón, a juzgar por el archivo de casos policiales graves recientes, no le falta. Por ejemplo, el 30 de junio de 2023 se produjo a pocas cuadras de allí, en Pasaje Gabito Bannat casi Alvarado, el crimen de Daniel Marcel, padre del periodista Marcelo Marcel y habitante del barrio Regional de casi toda su vida.
Minutos después de las 20, Marcelo Marcel llegaba a su casa en su automóvil marca Fiat Siena y cuando se disponía a ingresarlo al garaje fue abordado por dos hombres, uno armado con una pistola. Fue en ese contexto que Daniel Marcel, que estaba en la planta alta, bajó por la escalera y salió en defensa de su hijo. Uno de los delincuentes, al verlo, le disparó en el acto y lo mató.
A través de una veloz pesquisa, el asesino fue identificado como Nicolás Fernández, quien también vivía en la zona y padecía una grave adicción a las drogas. Tras ello, la policía lo detuvo esa misma noche frente a su casa de San Lorenzo al 6800, mientras disparaba su pistola en la vereda. Actualmente, aguarda la realización del juicio oral en su contra.
Antes, el martes 10 de noviembre de 2009, un adolescente de 16 años había matado de un tiro efectuado con un rifle al comerciante Fernando Pérez Azpitarte (40), cuando se hallaba dentro del locutorio de Alvarado y República del Líbano junto a su suegro.
Por otra parte, la zona suele ser escenario de incendios recurrentes, ya que en un el cruce de Tres Arroyos y Garay se encuentra el predio de depósito de vehículos secuestrados de la Policía Bonaerense. Allí, por medio de acciones vandálicas o situaciones accidentales, suelen prenderse fuego rodados y escombros, y es habitual la presencia de los bomberos.
El barrio Regional es denominado de esa forma por estar ubicado entre sus límites el Hospital Interzonal General de Agudos (HIGA), conocido popularmente como “Hospital Regional”.
En distintas etapas del pasado, sobre las mismas manzanas cercanas al jardín usurpado -comprendidas por las calles Garay, Nasser, Alvarado y Tres Arroyos- donde se ubican el depósito policial y el complejo habitacional Torres del Fonavi, se emplazaron un corralón municipal y también un cementerio.

Lo más visto hoy
- 1El Gobierno definió el destino de la Unidad Turística de Chapadmalal « Diario La Capital de Mar del Plata
- 2Increíble: chocó desde atrás a una moto frente a la caminera de Camet « Diario La Capital de Mar del Plata
- 3El emotivo homenaje de Rinaldi a su padre: un festejo que revivió Malvinas en la Copa Argentina « Diario La Capital de Mar del Plata
- 4Cómo estará el clima este sábado en Mar del Plata « Diario La Capital de Mar del Plata
- 5Alumnos de primaria amenazaron por video a otro con un arma « Diario La Capital de Mar del Plata