Buscan reconocer a quienes sostienen las cocinas populares
Presentaron un proyecto en el Concejo. Hoy funcionaron más de 15 cocinas populares simultáneamente en el marco de la acción de visibilización “#DíaDeLasCocinasPopulares" con la consigna “No solo es amor, es trabajo”.
El Movimiento Evita presentó el proyecto de Ley “Ramona” en el Congreso de la Nación, y un proyecto de ordenanza en General Pueyrredon para reconocer a quienes sostienen las cocinas populares. Hoy, desde las 12, funcionaron más de 15 cocinas populares simultáneamente en el marco de la acción de visibilización “#DíaDeLasCocinasPopulares” con la consigna “No solo es amor, es trabajo”.
En el ámbito local, Roberto Gandolfi, integrante de la organización y concejal del Frente de Todos presentó un proyecto de ordenanza para reconocer a quienes sostienen las cocinas populares, y para que el municipio brinde una ayuda económica en aquellos casos donde se cocina en la propia casa, con el objetivo de facilitar insumos como la garrafa de gas.
A su vez, el diputado nacional del Frente de Todos y referente del Movimiento Evita, Leonardo Grosso, presentó un proyecto de ley que propone un bono de $5.000 para trabajadoras y trabajadores de comedores y merenderos comunitarios durante la emergencia sanitaria por la pandemia del Covid-19.
El nombre del proyecto, “Ley Ramona” es un homenaje a la referente barrial de la Villa 31, Ramona Medina, quien falleció a causa del COVID-19 tras denunciar la falta de agua en su barrio.
Jorgelina Rodríguez, referente del Movimiento Evita Mar del Plata, explicó lo que pasa con las más de 15 cocinas populares que coordina la organización en la ciudad: “Las mujeres que sostienen las ollas populares en sus barrios permiten que vecinas y vecinos, familias completas accedan a un plato de comida calentito o una merienda rica. Sin el trabajo esencial de estas compañeras, en muchos barrios de nuestra ciudad no habría sido posible el aislamiento social obligatorio”, señaló.
Cerca de 4 millones de niños, niñas y adolescentes en Argentina atraviesan situaciones de inseguridad alimentaria, según un informe del Barómetro de la Deuda Social de la Infancia de la Universidad Católica Argentina (UCA), publicado antes del Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio (ASPO). Con la imposibilidad de realizar “changas” y tareas de trabajo informal, las familias sin ingresos, o con ingresos insuficientes que dependen de comedores y merenderos barriales se triplicaron, y se triplicó el trabajo de las referentes barriales que las sostienen.