El Gobierno Nacional, a través del secretario de Seguridad, Eugenio Burzaco, ratificó que se mantiene en alerta por la fecha en que se disputará la revancha por la semifinal de la Copa Libertadores de América entre Boca y River, el próximo martes 22 de octubre, cinco días antes de las elecciones.

En una entrevista concedida a LA CAPITAL, el funcionario manifestó que, si bien no habrá cambios en la organización del encuentro deportivo y que la reponsabilidad de la seguridad le corresponde a la Ciudad de Buenos Aires, “no es sensato” realizar un evento de esas características poco tiempo antes de los comicios.

“Para mí la fecha no es la más conveniente. Nosotros tenemos que usar todos los distritos, inclusive la ciudad, esa semana un tercio de nuestras fuerzas para un operativo electoral… Y tres días antes de una elección desviar recursos, que uno tiene que desviar muchísimos recursos, para hacer un partido de fútbol, no me parece lo más sensato”, dijo Burzaco.

Consultado sobre temores respecto de posibles incidentes como los ocurridos el año pasado en el Monumental, el funcionario habló de la política que llevó adelante el Gobierno desde la instauración del programa “Tribuna Segura”, por lo cual casi 4 mil personas tienen prohibido ingresar a la cancha por estar vinculadas a barras bravas.

“Si alguien quiere hacer un desmán, es un lugar y un momento de alta visibilidad. Es el típico caso donde los barrabravas pueden aprovechar las circunstancias y la visibilidad”, advirtió.

Acto seguido, Burzaco agregó: “Pero es un tema que seguramente debe estar hablando la Ciudad con Conmebol, y si lo van a hacer, es porque ellos creerán que lo pueden hacer. No es nuestra responsabilidad y no nos hemos querido meter salvo que nos pidan en concreto, por eso creo que el Presidente no ha opinado. Es un tema que tiene que organizar la Ciudad con Conmebol”.

Para explicar por qué el Gobierno no puede negar que el partido se juegue el 22 de octubre, el funcionario de Patricia Bullrich hizo una comparación: “Es como si le dijera a la provincia de Mendoza que no puede hacer la Fiesta de la Vendimia por una cuestión de seguridad. Si nos piden una opinión se la podemos dar pero no nos podemos atribuir nosotros ese rol”, mencionó.

De todas formas, recordó que “hace dos semanas hubo una amenaza puntual de la barra de River, primero al presidente de River, y después a la ministra de Seguridad. Y con la barra de Boca había pasado antes… Y hace un mes, la policía de la provincia de Buenos Aires detuvo a a parte de la barra de River armada yendo a enfrentarse con otro sector”.

Finalmente, Burzaco explicó que “no tiene ningún conocimiento de cambios” en la fecha del partido. Pero repitió que tiene “claro” que quien tiene “la responsabilidad plena y han pedido que así sea desde la organización del partido es la Ciudad de Buenos Aires, con lo cual son ellos los que tienen que pedir una postergación o rever si la fecha es la más conveniente”.