En reclamo de una ayuda económica por parte del Estado o la posibilidad de poder ingresar y trabajar, recicladores informales realizan un bloqueo “por tiempo indeterminado” en el acceso al predio de disposición final de residuos  de la ciudad.

Desde hace dos semanas, referentes de los cerca de 600 recicladores mantienen reuniones con el secretario de Ente Municipal de Servicio Urbanos, Sebastián D’Andrea, en búsqueda de una solución para cientos de familias a las que la pandemia terminó profundizando sus condiciones de vulnerabilidad. Antes de la irrupción del coronavirus en la ciudad y el país, lo conseguido en el predio era su principal medio de subsistencia, pero ahora, sin la autorización para ingresar, aseguran que está ganando terreno el hambre y la desesperación.

Presentado por parte de los recicladores un protocolo de trabajo que finalmente fue rechazado por el Municipio, los manifestantes señalan que desde la comuna se comprometieron a gestionar un subsidio junto a Nación y Provincia, pero que “la respuesta recién estaría la semana que viene”, lo que avivó los reclamos y provocó el bloqueo.

“Ayer D’Andrea nos dijo que recién iba a tener respuestas la semana que viene, y yo le dije que no íbamos a poder garantizar que la gente que no quiera salir a cortar porque este no es el primer corte. Desde la semana pasada que estamos hablando de esto y todo el tiempo nos ‘bicicletean'”, indicó a LA CAPITAL Maite García, referente de los recicladores, quien aseguró que “es la necesidad la que saca a la calle a la gente”.

Según señaló García, los recicladores permanecerán en el lugar “por tiempo indeterminado”. “Nosotros no molestamos nunca. Siempre se muestra el glamour y no la miseria en la ciudad. Hoy necesitamos una respuesta, acá están la mitad de los desocupados, de esto viven 600 familias”, señaló.

Según explicó la referente, lo que han logrado hasta el momento es un acuerdo entre la Pastoral Social, el Municipio y la Provincia para “reforzar la entrega de mercadería”.

“Pero necesitamos un ingreso porque no podemos comprar una garrafa con mercadería o pagar el remis si tenemos que ir al médico. No tenemos más nada. Hace 60 días que estamos todos en nuestras casas sin tener ningún tipo de ingreso”, señaló.

En este contexto fue que este miércoles le presentaron al funcionario municipal un protocolo que luego fue rechazado. “La propuesta la elaboramos para que cada persona pueda ingresar al predio dos días a la semana, pero nos dijeron que no, porque la situación de la pandemia en Mar del Plata hoy no es la misma que la semana pasada”, señaló.

“En el predio todos hacemos un trabajo particular. Yo trabajo en los camiones de la 9 de Julio, hay otras personas que vienen a juntar alimentos para los chanchos porque viven en el campo, otros que solo vienen a retirar lo que tiran los supermercados y se llevan la carne. También están los que solo buscan ropa porque después la refaccionan en sus casas y las venden”, explicó.

“Hoy estamos con una situación que nos excede y el Estado no nos da una respuesta. Yo no puedo ir con promesas a la mesa de mi casa, ahí tengo que llevar un plato de comida“, concluyó.