La secretaria de Desarrollo como si no tuviera a su cargo la atención de problemas que requieren urgente solución y como si ellos pudiesen esperar, emplea gran parte de su tiempo en merodear el despacho principal de la comuna y sus anexos, visitando sus correligionarios del Concejo Deliberante, roscando incansable y a veces frecuentemente trasladando la política partidaria a algunos cafés de la zona. Prudentemente se retira por la salida de la calle La Rioja, cuando comienzan los aprestos de movimientos sociales que se instalarán con sufrientes pobladores de los barrios carenciados que vienen a reclamar diversos tipos de asistencia. Sí, a esa hora, en compañía de sus fieles asistentes Vilma Baragiola iniciará una recorrida por determinadas zonas de la ciudad, sobre todo por la propia zona céntrica aledaña inclusive al palacio municipal, podría censar a los ignorados mendicantes que pasaron la noche en las entradas de galerías comerciales y veredas sobre diarios y cartones, trapos y retazos de cobijas viejas. Hasta en algún caso podría oler las consecuencias de “la carencia” de baños públicos.

Esto viene a cuento de su afán, compartido con el secretario de Gobierno Alejando Vicente, por denostar al periodismo criticón cuando se refiere a situaciones en la que funcionarios no están a la altura de las exigencias de sus cargos, frente al reclamo de los vecinos, inclusive de muchos de los que votaron a Carlos Fernando Arroyo. Las notas referidas a esos actos se deben, para Baragiola y su seguidor político, a obra de sectores que pretenden desestabilizar al gobierno municipal… Por eso, vamos por parte y desmenucemos como decía aquel inglés cuchillo en mano, y veamos quién desestabiliza más. Será la gente de afuera o los de adentro con su inoperancia, desidia y desatención de las funciones por las que cobran mucho más dinero que el que ganarían en la actividad privada.

Carta desestabilizante de conciencias

Hace pocos días LA CAPITAL publicó -no por desestabilizar- la “estremecedora carta de un fraile tras la muerte de un hombre en situación de calle”. El padre Ramiro de la Serna integrante de la fraternidad de la casa de los jóvenes “Hermano Francisco” dedicada a la pastoral juvenil e integrante de la Fundación Franciscana que viene -lunes 7 del cte.-, dice en ella de realizar los trámites municipales y de cumplir con “La noche de la caridad” y de retirar el cajón de cartón prensado para enterrar “a Marcelo, un hermano en situación de calle, muerto la semana pasada de muerte natural. Qué ironía llamar (la autopsia) muerte natural a las consecuencias vividas por un hombre que vive en la calle, soportando la intensidad del frío, sin atención médica, con escasa comida y nula contención… El maltrato y el desinterés por los pobres, claman cielo” y concluye con una mención de Emmanuel Mounier un filósofo francés creador de la corriente que se denominó, entre los 50 y 60, “personalismo cristiano”.

La carta con otros detalles es demoledora y claro la ausencia absoluta de funcionarios que aporten al menos presencia en esas tramitaciones en un caso tan lacerante, allí obvio, Vilma se destaca por su ominosa ausencia. Sin malicia, pero si con espíritu crítico cabe aquí la pregunta ¿quién desestabiliza al gobierno?, será el diario de la ciudad que informaba sobre la durísima reconvención, con denuncia ante la Corte del juez de Familia José Dominoni imputando al gobierno de Arroyo por el incumplimiento de parte de la Dirección municipal de la Niñez de normas de protección a tres niños que derivó en la muerte de una nena a manos del propio padre en el barrio “La Herradura”.

La gravísima imputación por el incumplimiento de un funcionaria -¿Vilma?- es elevada en queja al gobierno de María Eugenia Vidal y a la Suprema Corte. Tal vez esté llegando el tiempo en que el jefe le dé licencia para iniciar la campaña por la senaduría. Es tremendo lo dictaminado por el juez, va más allá de una mera desestabilización de un funcionario -el área es de Desarrollo Social- ya cargado de “situaciones y en este caso” culposas.

No hay nada peor no sólo para un gobierno sino para la política -en esencia la búsqueda del bien común- que recurrir a un literato ramplón o a un burócrata atornillado y aburrido para deshumanizar problemas centrales del ser humano, porque así se llega a catalogarlo como “gente en situación de calle” y unos meses más tarde podrían archivarlo como “gente en tránsito hacia el cementerio”… En este caso, aún más terrible, de no aparecer un juez tan respetable se podría haber archivado en “felicidio”…, lo de la burocracia abombada y del funcionario político ausente que ha colaborado con su inacción, incumplimiento y desestabilización ni existirían en ningún archivo y se repetirían, Dios santo, quién sabe cuántas veces.

El macho del hall

Imprevistamente quien se conocía sólo por su discreto paso por la subsecretaría de Gobierno con Oscar Pagni como secretario. Claro, levantar el copete y darse diques con la muralla firme de ese jefe no era sino para destacarse como el mero cómico de Carlos Tejedor. En ese rol se venía destacando en las legendarias reuniones quincenales, buen asado y caro vino, la mayoría funcionarios nuevos de impensados salarios, como lo consiguió José Cano, de economía en emergencia, y de ex que supieron ahorrar tras 6 años de sudados afanes en el gobierno.

El postre de esas tenidas era la intervención de Alejandro Vicente cuando aparecía en el escenario en su papel brillante y desestabilizador ante auditorio que enfervorizados coreaban “vamos a volver, vamos a volver”…, mejor entonados que la Cámpora. El reality a cargo exclusivo del secretario de Gobierno era la narración y recreación de “papelones”, equivocaciones y desaciertos del intendente Arroyo, del que Vicente es hombre de confianza compartiendo la distinción con Vilma Baragiola. Decían los radicales, todos bendecidos y encandilados por Daniel Katz, a veces rodaban por el suelo a fuerza de carcajadas. Más desestabilizante imposible, por eso al trascender, el divertimento se acabó.

Pero el hombre con vocación circense ahora cambió de personaje y de escenario, ahora es central y trascendente. Actúa de macho del hall del palacio municipal. Allí actúa de macho nervioso, agresivo y vociferante, obviamente frente a mujeres. Eso sí siempre tiene a mano una defensora de ley, Vilma. Y parece decidido a extender su escenario, hace dos sábado se instaló en el café de la esquina y tomó como adversario a un púgil de muchos combates que sólo le informó de un tema que lo podía desfavorecer. Pero Tato Serebrinsky no es perro de atar con chorizos y como la cuestión crecía otro “fighter” intervino, Gustavo Blanco. Como la cosa pasaba a mayores los parroquianos azorados intervinieron. Blanco tiene otra categoría, al lunes siguiente se juntó en otro café de las inmediaciones con Tato y como caballeros se arrepintieron del papelón y un fuerte apretón de manos selló la paz. Pero ¿quién desestabiliza, los periodistas y los medios de tal por cuál?

Para final de este primera entrega. Espigando en el trigal se encuentra el aprovechado titular del Emder y figura del Pro, Guillermo Volponi que no encuentra el camino para hacerse de los 10 millones de pesos que le consiguió Mc Allister para la terminación de dos impresionantes polideportivos para niños, jóvenes y vecinos de dos barrios de alto riesgo. Tampoco tuvo presupuesto para entregar como se viene haciendo desde hace años modestas copas y medallas a los jóvenes participantes de los juegos barriales. Eso sí es conocido que consiguió la designación de seis nuevos “ceos” de altos sueldos en su staff, antes se manejaban con sólo dos. Claro con ese dispendio ahora hay que ahorrar a costa de los vecinos..

Fruta suelta

El peronismo milita por los cuatro costados. El sábado en uno de los cines impresionantes del Paseo Aldrey, Daniel Scioli presentó el audiovisual donde se refleja la trayectoria del ex gobernador en lo personal, en lo deportivo y en lo político. En este caso impresionante a un año del gran debate, las promesas y desmentidas de Mauricio y el increíble cinismo con que aseguraba y se enojaba porque Scioli “metía miedo”, anunciando el ajuste, el desempleo y en fin el desastre que se venía para la economía y la industria nacional.

En fin todo lo que ha venido encima, en especial para los trabajadores y los humildes…, y lo que se vendrá. Hubo gente de los sectores peronistas, el presidente del partido Pablo Vacante y Susana Salerno, la diputada nacional Fernanda Raverta, el provincial Manino Iriart, los concejales Daniel Rodríguez, Balut Tarifa, Marcos Gutiérrez; Rapacioli, Emilse Vulevich, Nora Estrada, Vanina Alonso, Miriam Salinas, Rosa Tortosa, etc., referentes de diversas agrupaciones y partidos asociados con el MNA con Chucho Páez y una nómina inagotable.

Patriada que se agranda. El impulso inicial de Rapacioli, Bognadich, Filipini, Smata, Brucetta, Salinas, Rodríguez y largo etcétera, logró en la semana otras sumas a su encuentro semanal, el ingeniero Horacio Tettamanti, el titular del “Mar del Plata, Puerto Región” Daniel Sosa y Fernanda Raverta. Este jueves se sumará el referente sciolista Manino Iriart.

Sonrisa de par en par. Lucas Fiorini y Alejandro Carrancio de sonrisa de par en par con el anuncio de que en la próxima semana reinicia sus recorridos Baires – Mardel – Baires, el ferrocarril Roca por que tanto lucharon. Pero se preparan porque el fantasma del ataque popular a través del aumento en las tarifas en los servicios requiere nuevas campañas, hay boletas que llegan en cuotas explosivas.

La bomba de Alvarito. El director de cooperativas luego de crear un pandemonio entre las boinas blancas y los globos amarillos, está preparando otros explosivos en lo que se puede ir el resto. Ha comenzado las gestiones con dirigentes vecinales, sindicales y del justicialismo para crear una fuerza partidaria formal para respaldar abiertamente como peronistas a Carlos Arroyo. Y no es rumor, lo declara abiertamente en cualquier mesa y asegura que está representando a “muchísimos compañeros que quieren acompañar esta decisión”.