Un joven de 18 años que se desempeña como limpiavidrios en la zona céntrica fue baleado en horas de la tarde por al menos cuatro personas que lo abordaron en el barrio Las Heras.

El hecho ocurrió alrededor de las 15 en Gutemberg y Tettamanti, cuando la víctima caminaba hacia su casa, ubicada en esa zona. Al parecer, en ese momento interceptó al joven un automóvil en el que viajaban cuatro personas armadas.

Según informaron fuentes extraoficiales consultadas por LA CAPITAL, los agresores obligaron al limpiavidrios a abordar el vehículo, en el que después recorrieron varias cuadras. Luego de ello, se detuvieron e hicieron descender del rodado al joven.

Tras ello, uno de los presentes extrajo un arma de fuego y le disparó dos veces en el muslo izquierdo a la víctima, que quedó tendida en el piso, mientras los atacantes escapaban. Más tarde, el herido fue trasladado al Hospital Interzonal General de Agudos (HIGA), donde los médicos dispusieron que fuera operado por haber sufrido una fractura en el fémur como consecuencia de los balazos.

En tanto, policías del Destacamento HIGA tomaron conocimiento del ingreso del joven al nosocomio y notificaron del hecho a sus pares de la comisaría decimosexta, que tiene jurisdicción sobre el barrio Las Heras. Desde ese momento, los uniformados comenzaron a investigar el caso y también dieron aviso al fiscal Carlos Bruna, quien se encontraba de turno.

Conforme trascendió, la víctima se encuentra consciente y fuera de peligro, pero al declarar dijo que no está en condiciones de reconocer a los agresores. Por eso, los investigadores consideran que será difícil esclarecer el caso, ya que sospechan que el joven no está dispuesto a aportar datos de importancia para determinar quienes lo atacaron y detenerlos.

De acuerdo a la información que pudo recolectar este medio, tanto desde la Justicia como desde la policía sospechan que la agresión se produjo en el marco de una venganza o ajuste de cuentas, aunque no se conocen los motivos. También se supo que la víctima cuenta con entradas a comisarías por problemas con la ley penal cuando era menor, pero como mayor no presenta antecedentes delictivos.

Esta tarde el joven permanecía internado en el HIGA, y su estado de salud evolucionaba normalmente. Por su parte, la policía continuaba con investigación del hecho pero aún no se habían producido identificaciones ni, por ende, detenciones.