Entre crimen o suicidio oscila la verdad de la muerte de Héctor Plá en Miramar. Ayer se hicieron allanamientos en busca de la misteriosa arma.
MIRAMAR (Corresponsal)
La muerte de Héctor Plá (86) sigue siendo un dilema para los investigadores de Miramar aunque alguna luz parece encenderse para iluminar ese misterio. Ayer fueron allanadas dos viviendas pertenecientes a mujeres que visitaban de manera regular al jubilado y la policía logró secuestrar un teléfono celular que será analizado por peritos.
Entre las 15 y las 17 de ayer, la policía de investigaciones de Miramar, que tiene como responsable al comisario Mariano Laure y personal de fiscalía a cargo de Ana Caro, encabezaron allanamientos en dos viviendas situadas sobre la calle 1 bis y 52 de Miramar, en busca de pistas que permitan acercarse a la verdad en torno a la muerte de Plá (86), quien fuera encontrado por su nieto el pasado 22 de febrero sentado en un sillón con un disparo en la sien y sin un arma cerca.
Ante la necesidad de lograr avances en el caso -hasta el momento la figura de la causa es “averiguación de hecho”- los investigadores reconstruyeron algunas relaciones de Plá y entonces pudieron determinar que lo visitaban con regularidad dos mujeres. La versión inicial es que lo ayudaban con la limpieza de la casa.
Precisamente, ayer los allanamientos se efectuaron en las viviendas de las mujeres, donde se fue en busca del arma desde la cual salió el proyectil calibre 32 largo que mató a Plá.
La requisa, autorizada por la Justicia de Garantías, no arrojó resultados positivo pero en las casas donde residen las dos mujeres (una de 25 y otra de 66 años) se obtuvo un teléfono celular.
Si bien no quedaron detenidas, a la mayor de ellas se le notificó la formación de causa y fue trasladada al asiento de policía científica en Mar del Plata para ser puesta a disposición del cuerpo médico, el cual le realizará las tareas periciales correspondientes.